¿Quién fue Juan Pablo Duarte?
Juan Pablo Duarte y Diez, es conocido como el Padre de la Patria, el libertador de nuestro país, quien junto a Sánchez, Mella y otros hombres hicieron posible que naciera la República Dominicana. Duarte nació el 26 de enero de 1813, era hijo de Juan José Duarte de origen español y Manuela Diez oriunda de El Seybo.
El momento en que Duarte nació y recibió su educación elemental, fue denominado como España Boba o Independencia Efímera, en el que la colonia de Santo Domingo se independizó temporalmente de España. Por ello su formación moral y su educación estuvo influenciada por la creciente necesidad de obtener una verdadera libertad. Cuando en 1822, los haitianos ocuparon la parte española de la isla, Duarte supo en su corazón, que su misión era hacer que los ciudadanos de entonces, que aun no eran catalogados como dominicanos, tuvieran identidad.
Por esta razón cuando Duarte regresó de Europa en donde realizó estudios diversos, formó la sociedad secreta La Trinitaria, la que sirvió de base para el plan de independencia que Duarte había diseñado. Fue así como en 1844, luego de múltiples percances con las autoridades haitianas que gobernaban la colonia, Sánchez y Mella lograron la Independencia, bajo los preceptos que Duarte había trazado.
Duarte pasó a la historia como el hombre que marcó el inicio de la República Dominicana, si bien Sánchez, Mella y otros hombres también fueron luchadores incansables, se destaca más la labor de Duarte porque fue el autor intelectual de la Independencia.
Muchos son los atributos que pueden citarse de Duarte, pero su nombre encaja en muchas categorías. Juan Pablo Duarte, tenía dotes de artista literario, escribió poesía, y tuvo una gran participación dramática en la sociedad de teatro La Filantrópica que sustituyó La Trinitaria. Su ideario, que no era más que la recopilación de sus pensamientos revela su capacidad para las letras y su forma de pensar respecto a la necesidad de Libertad.
Sin duda Duarte se tomaba en serio su creencia de que la política no es una especulación; es la ciencia más pura y la más digna, después de la Filosofía, de ocupar las inteligencias nobles. Por esta razón, se le puede considerar el primer y más noble político dominicano.
En este sentido expreso mi postura frente a los conocimientos e ideales de Duarte, que si como país hubiésemos seguido su tendencia y aplicado sus pensamientos en el gobierno y en otros tantos aspectos seguramente hubiésemos tenido una organización política y social mucho más digna, justa y ejemplar. Es cierto que nuestro país atravesó por muchas situaciones críticas en los primeros años de su existencia como nación, pero es tarea de quienes presiden los gobiernos, fundamentalmente, influir en la educación y promoción de los valores de Duarte en la sociedad dominicana.
¡Qué lamentable, que a 203 años, de su nacimiento, Duarte sea hoy un retrato borroso, que todos miramos, pero que no todos sabemos descifrar!
No olvidemos a Duarte, su memoria necesita ser rescatada y que las generaciones presentes y las que vienen, puedan decir al menos quien fue Duarte y cuál fue su legado, que puedan apreciar que tenía razón el patricio cuando dijo que “Vivir sin Patria es lo mismo que vivir sin honor”.