6 claves para adelgazar y no fallar en el intento. ¡Te sorprenderás!
¿Cansada de intentar adelgazar y no ver los resultados? Es muy probable que no estés teniendo en cuenta todo lo que se necesita para perder kilos de forma eficaz y sin volver a recuperarlos.
Para empezar, has de tener en cuenta que una vez se acumula grasa es muy difícil volver a eliminarla; sin embargo, poniendo mucha fuerza de voluntad y disciplina en este proceso, se pueden conseguir increíbles resultados a mediano y largo plazo.
Hoy en día se sabe que el tener un peso saludable es algo que va más allá de la apariencia física. Las personas que sufren de sobrepeso u obesidad están en un alto riesgo de desarrollar diversas enfermedades crónicas que afectan de una u otra forma su calidad de vida.
Por esta razón, el adelgazar se está convirtiendo en una necesidad para miles de personas, quienes constantemente luchan por obtener buenos resultados.
Si te sientes identificada, quizá te interese conocer las 6 claves para bajar esos kilos y no fallar en el intento. ¿Lista para el reto?
1. Elimina las tentaciones
¿Alguna vez has revisado todos esos alimentos que tienes en tu nevera? Si aún no lo has hecho, te invitamos a que lo hagas y sumes calorías.
¡Es momento del cambio! Elimina todo tipo de alimentos que pueden representar una tentación para arruinar la dieta:
- Frituras.
- Dulces.
- Embutidos.
- Enlatados.
- Congelados.
- Salsas.
En lugar de estos, procura llenar el frigorífico con alimentos saludables y de apoyo para adelgazar, tales como:
- Pescado azul.
- Frutas de todo tipo.
- Vegetales de todo tipo.
- Leche y derivados (bajos en grasa).
- Grasas magras.
- Ácidos grasos esenciales.
2. Come 5 veces al día
¡Dile no al mito de bajar de peso sin comer! Es cierto que algunas de las famosas “dietas milagro” pueden ayudar a bajar kilos en tiempo récord; sin embargo,conllevan efectos negativos en la salud y casi siempre terminan fracasando.
Para que la dieta sea efectiva y permanente debe ser balanceada y se ha de distribuir para 5 horas del día:
- Desayuna bien.
- Consume algo ligero a media mañana.
- No te saltes el almuerzo.
- Toma un tentempié en la tarde.
- Cena ligero.
El secreto está en que las comidas sean moderadas y con todos los requerimientos nutricionales.
3. Incrementa el consumo de agua
Ningún otro líquido puede hacer tantas maravillas por el cuerpo como lo hace el agua. Hidrata todo el organismo, ayuda a mantener buenas energías y, por si fuera poco, apoya el proceso de adelgazamiento.
El agua es esencial para desintoxicar el organismo y proporciona sensación de saciedad para evitar la ingesta excesiva de calorías.
Lo ideal es que tomes de 6 a 8 vasos de agua al día, a lo largo de toda la jornada. Si no te gusta el agua sola, puedes combinarla con bebidas saludables como:
- Licuados naturales.
- Zumos de fruta.
- Infusiones.
- Aguas frutales.
4. Come despacio
La velocidad con la que comemos influye en la manera en cómo el organismo asimila los alimentos que se ingieren.
Se estima que el cerebro tarda hasta 20 minutos en recibir las señales de satisfacción tras comer, razón por la cual es mejor comer despacio.
Además, es importante que mastiques bien los alimentos para que los procesos digestivos se den de forma óptima y en el tiempo adecuado.
5. Haz ejercicio
Estás cansada de oírlo, pero es imprescindible. No tienes que realizar un entrenamiento de alta intensidad para ver los resultados.
Con 30 minutos de actividad cardiovascular 3 o 4 veces a la semana y otros 20 minutos de ejercicios de fuerza 2 o 3 veces por semana, provocarás cambios importantes tanto en tu salud como en tu peso.
La combinación de estos dos tipos de ejercicios ayuda a quemar grasa con más facilidad y es la clave para ganar masa muscular.
6. Duerme bien
Podrías pensar que el sueño no tiene que ver pero, en realidad, desempeña un papel muy importante. Cuando la calidad del sueño es mínima aumenta la producción de cortisol, una hormona asociada con el estrés y los cambios de humor.
Además, incrementa la ansiedad por la comida y esto conlleva a elegir alimentos con un elevado contenido de calorías en horarios donde el metabolismo es aún más lento.
Lo ideal es que duermas de 7 a 8 horas diarias, sin interrupciones.