9 cosas que suceden mientras duermes
Mientras dormimos ocurren muchas más cosas de las que pensamos ¿Quieres saber cuáles son? Algunas te van a sorprender.
Solemos pensar que cuando nos acostamos es como si el cuerpo hibernara hasta el otro día. ¡Nada más alejado de la realidad! El organismo sigue funcionando aunque tengas los ojos cerrados y te quedes quieto en la cama. ¿Quieres saber cuáles son las 9 cosas que suceden mientras duermes? ¡Entonces sigue leyendo!
Curiosidades que ocurren mientras dormimos
¿Sabías que la tercera parte de tu vida la pasas durmiendo? Puede ser un poco más o un poco menos, pero lo cierto es que en esas horas el cuerpo no se queda paralizado esperando a que suene el despertador o a que un ruido de la calle te haga saltar de la cama. Te contamos cuáles son las cosas (muchas curiosas) que pasan cuando estás dormido:
1. El cuerpo “tiembla”
Los espasmos de este tipo son más frecuentes de lo que creemos. Cerca del 70% de la población mundial los “sufre”. Además hay ciertos potenciadores de los temblores, como pueden ser el estrés o lo que comemos. También están relacionados con el cambio que protagoniza el cuerpo al dormirse.
El llamado “espasmo mioclónico” es la sensación de que nos caemos cuando nos estamos quedando dormidos. Algunas teorías indican que esto es un vestigio que nos ha quedado de nuestros antepasados, que dormían en los árboles. Gracias a ese reflejo evitaban caerse al suelo.
2. Se producen más gases
En realidad lo que ocurre es que no podemos controlar las emanaciones de nuestro cuerpo mientras dormimos. Si a eso le sumamos el hecho de que el cuerpo está en una posición más relajada, es más fácil que se liberen gases… ¡Sin nuestro permiso!
Si te ha pasado alguna vez y te da algo de vergüenza, puedes reducir el problema. ¿Cómo? Comiendo de forma ligera en la cena. Evita las legumbres y deja pasar 3 horas desde que terminas de comer hasta que te acuestas.
3. Piensas que tu cabeza va a explotar
Es algo realmente curioso que ocurre a menudo. Algunas personas han indicado que es una sensación horrible. Se despiertan tras escuchar un ruido muy potente, como de una explosión.
Puede que te levantes sobresaltado de la cama y corras a la ventana a ver si tu coche está en buenas condiciones o si tus vecinos están durmiendo plácidamente. Te sentirás desorientado y asustado. Esto ocurre en momentos de mucho estrés y ansiedad, o bien si no se está durmiendo lo suficiente.
4. Adelgazas
¿Cómo? ¿No tengo que hacer dieta ni ir al gimnasio? ¡Me pongo a dormir ahora mismo! No es que te vayas a levantar con varios kilos menos, sino que durante las horas de sueño el cuerpo consume la misma energía que cuando estás despierto (para mantener activas las funciones vitales). Además cuando estás durmiendo no comes ni sientes necesidad de ingerir alimentos dulces o grasosos.
Por el contrario, si duermes mal o poco, estarás generando más ghrelina, una hormona que hace que tengamos más apetito en cualquier momento del día.
5. Sueñas siempre lo mismo
Quizás no te acuerdes, pero cada noche (o varias veces a la semana) sueñas con una misma situación o persona. La teoría que explica esto se llama “simulación de amenaza” e indica que los sueños proyectan nuestros miedos y traumas. Pero eso no termina allí, ya que se cree que vamos a soñar con ello las veces que sean necesarias hasta que nos enfrentemos al problema y lo solucionemos.
6. Creces
Nuevamente, no se trata de un milagro nocturno, sino que durante la noche la columna se relaja, por lo tanto, nos estiramos unos milímetros. Además, los discos que hay entre cada vértebra se hidratan, al ser como una esponja, crecen de tamaño y nos hacen estar un poco más altos. Quizás tengas la sensación de haber crecido cuando te levantas por la mañana. Ahora ya sabes la razón.
7. Los músculos se paralizan
¡Pero no todos! Quédate tranquilo, que no dejarás de respirar ni tu corazón de latir. El cuerpo da instrucciones a ciertos músculos para que se bloqueen mientras dormimos. De esta manera evitamos movernos al ritmo de los sueños.
El problema reside cuando el cerebro no da la señal a ciertos grupos musculares para que se despierten y… ¡pensamos que hemos perdido un brazo en medio de la noche! También puede ocurrir que de tanto dejar una extremidad quieta se duerma y comience el insoportable hormigueo.
8. El cerebro hace limpieza
Esto quiere decir que durante las horas de sueño la mente aprovecha para eliminar todo aquello que considera inservible, desde algo que viste en televisión a un recuerdo o experiencia de ese día. Mientras dormimos el cerebro filtra todos los datos que ha recibido, por ello, una teoría indica que los sueños son la consecuencia de nuestras acciones cotidianas.
9. Los ojos se mueven más
En la fase de sueño llamada “REM” (Rapid Eyes Movement o movimiento rápido de ojos, en español) los globos oculares se mueven de aquí para allá sin parar. Es como si delante de ellos hubiera una pantalla con cientos de escenas en diapositivas que se van sucediendo una tras otra sin descanso.
En esta etapa el cuerpo se está preparando para el descanso y aún muchas funciones o músculos siguen en funcionamiento, como si estuviéramos despiertos. Otro dato curioso sobre la fase REM: si nos despiertan en esa fase nos sentiremos descansados, renovados y en estado de alerta.