MLB y franquicias GL tumban el pulso a los esteroides
Las nuevas políticas establecidas por Major League Baseball en el país, en su batalla por erradicar el flagelo de los esteroides finalmente surten sus efectos entre una población estimada en 800 peloteros novatos que se desarrollan en el gran trampolín para las Grandes Ligas llamado Dominican Summer League.
El porcentaje de jugadores suspendidos por caso de dopaje que en 2005 era de un 6.1 por ciento, ya para el año pasado la reducción llegaba hasta un 2.1, hecho que refleja de manera clara las prescripciones que vienen tomando los prospectos y sus allegados más cercanos al momento de usar un determinado medicamento.
Una batalla titánica, emprendida por MLB, que precede a lo que muchos llaman el gran “dolor de cabeza” existente en la Liga de Béisbol de Verano, entidad que de forma paralela con el salto de unos 400 peloteros hacia las Grandes Ligas registra su aspecto más negativo en los más de 300 prospectos que han sido suspendidos por el uso de sustancias no registradas bajos los reglamentos que rige la entidad beisbolera.
El incremento de las pruebas emitidas a las 30 franquicias que operan en la Liga de Verano, la concientización brindada a jugadores por los patrones y directores médicos de las diferentes academias, así como la visión propia de los novatos de no caer en el marasmo donde muchos han resbalado, tienen a los prospectos más concentrados en desarrollar su talento por cuenta propia y no buscar ayuda en una que otra sustancia, que al final malogran las carreras, afectan la salud y quienes las consumen quedan marcados por el descrédito.
Incluso, las mismas franquicias han optado por realizar propiamente sus pruebas, en el caso de los Diamondbacks de Arizona las hacen y estas son enviadas a un laboratorio especializado en Estados Unidos, como lo expresa Vladimir Medina, director médico de la entidad y quien cada día concientiza a los más de 50 novatos enclavados en la organización.
“Es un reto que hemos aceptado y del cual esperamos salir airosos, estamos librando la gran batalla y en lo que respecta a nuestra organización la reducción ha sido más que notable”, agrega el galeno, quien tiene unos ocho años laborando con los Diamondbacks y un graduado en la carrera de medicina en la UASD.
Así como Vladimir tiene la etiqueta de profesional, otras franquicias han optado por reclutar personal médico con licenciaturas, maestrías y otras especialidades realizadas en universidades norteamericanas, como el caso de los Cachorros de Chicago que tienen en Wilkin Pérez a su director médico. Él, como los demás, tiene gran responsabilidad sobre sus hombros, brindarle charlas periódicas a los prospectos, una constante comunicación, chequeos frecuentes forman parte de su filosofía de trabajo en su esfuerzo por realizar sus aportes para que esta cantidad disminuya en su máxima expresión.
“Realizamos una ardua labor de concientización para los muchachos, siempre tratamos que tengan presentes qué tanto los perjudica el hecho de incurrir en sustancias que en nada les favorecen”, agrega Pérez, quien tiene una licenciatura en fisioterapeuta y quien incluso laboró con el equipo de Panamá en el pasado Clásico Mundial de Béisbol.
Junto a él Chris Olson (Texas), Jonathan Casero (Oakland), Phil Mastro (Boston) representan apenas algunos que vinieron desde los Estados Unidos para trabajar con franquicias de béisbol en Dominicana. En el caso de Pérez en su oficina lo primero que se alcanza a observar es la amplia lista de medicamentos prohibidos por la MLB para con los noveles jugadores.
Sustancias prohibidas
Fármacos como el Anadron 50, Stanozolol, Boldenone, Sustanon, Durabolin, Dianabol, Testoterona, Human Grwth Hormone, Cytanel, Anavar, The Cream, Amphetamine, Furazabol, Clostebol, Calusterone, Mibolerone representan apenas un puñado de las sustancias prohibidas por la MLB y quienes las usen enfrentarían en lo inmediato una suspensión de unos 50 partidos.
“Uno de los principales retos de nuestra oficina es erradicar esta mala práctica que tienen los peloteros novatos y creo con firmeza que estamos ganando la pelea”, expresó hace unos días a Listín Diario, Jorge Pérez, quien dirige la Oficina de MLB en el país.
Con orgullo se refería al 2.1 por ciento que se registra actualmente y donde con el paso de los días están llegando al lugar que aspiran, pero han tenido que poner mano dura para enfrentar este mal.
Tanto así que el solo hecho de encontrar una jeringuilla en la academia implica una suspensión para el jugador sospechoso de haberla utilizado y una multa para el equipo. Con frecuencia la MLB realiza muestras al azar, las mismas son controladas por el laboratorio Free Drugs Sports, además de que los propios equipos hacen sus chequeos médicos.
“El muchacho que usa una determinada sustancia prohibida es porque le da la gana, ahora es muy difícil el poder burlar esos controles, desde antes de ser firmados les realizan pruebas médicas, incluso hasta los entrenadores independientes han ido tomando conciencia sobre este hecho”, señaló Orlando Díaz, presidente de la Dominican Summer League.
Algunos ejemplos
De los casos más recientes de prospectos se encuentran Leudys Benzant, de los Atléticos (pitcher); José Valdez, Detroit (lanzador); Leonard Lorenzo, lanzador; Erickson Salaya, jardinero y Allixon Cequea, antesalista, estos últimos de los Cerveceros.
Antes que ellos, ya habían dado positivo los lanzadores, Yeimis Mendoza, (Marlins), Jorge Hernández (Nacionales); Juan Díaz (Nacionales); Saulo Alcántara (Orioles), Francis Vizcaíno (Rays); Wilmer Colmenares (Dodgers); Freddy Rodríguez (Kansas); Joel Matos (Arizona); Alexander De los Santos (Yankees), Daury Aquino (Yankees), además del receptor Jhancarlos Infante (Rays).
“Antes los casos eran mayores que los existentes en la actualidad, la única diferencia era que en el pasado no eran publicados como acontece ahora pero trabajamos en limitarlos cada día”, expresó de su lado, Pablo Peguero director para América Latina de los Gigantes de San Francisco y quien cuando los muchachos son despachados hacia sus hogares los reúne junto a sus padres y les dice: “Lo que entre por sus bocas y se inyecten es responsabilidad de ustedes mismos”.
La disputa es fuerte, pero la misma no solo se está echando sino que ya se observan los resultados favorables y todo gracias a un esfuerzo de equipo que busca destruir a un peligroso enemigo: los esteroides.
BOLDENONE LA MÁS USADA
Una sustancia casera de nombre “caballito” se une a la Boldenone y la Stanozolol, las cuales pueden ser adquiridas en fármacos como las más usadas por los novatos con hambre de exhibir un mejor rendimiento.
En los años recientes un 55 por ciento de los prospectos dio positivo a Boldenone, un 30 lo hizo a la Stanozolol, mientras que las demás más usadas fueron la Norandrosaterona con 9.4 por ciento, Nandrolona con 10 por ciento, según datos que suministra la oficina de MLB.
Boldenona es un esteroide utilizado en el ámbito veterinario para regular el peso corporal de caballos, perros y ganado. Es fácil de ser detectado porque produce metabolitos detectables en la orina varios meses después de ingresar al organismo. El stanozolol es uno de los anabólicos más comercializados. Evita el exceso de líquido en el cuerpo y es popular en deportes que combinan fuerza y velocidad.
fuente: www.listindiario.com