La inteligencia puede medirse con un escáner
Científicos en Estados Unidos identificaron las variaciones en el cerebro que son responsables de la inteligencia de una persona. En el futuro, afirman los investigadores, el coeficiente intelectual podrá medirse con un escáner.
La investigación, llevada a cabo en la Universidad de Washington, en St. Louis, encontró cuáles son los factores que distinguen a una persona excepcionalmente inteligente del resto de los humanos comunes y corrientes.
Tal como se sospechaba, el tamaño del cerebro sí importa.
Asimismo, la investigación publicada en Journal of Neuroscience (Revista de Neurociencia), encontró que el nivel de actividad y las conexiones neurales de una región cerebral específica también muestran qué tan inteligente es un individuo.
Los estudios recientes han mostrado que la corteza prefrontal lateral es un centro esencial de procesamiento mental de alto nivel.
En esta región, ubicada debajo de la sien, se llevan a cabo funciones cognitivas complejas, como el proceso de toma de decisiones y la coordinación de pensamientos, acciones y metas.
La nueva investigación encontró que los niveles de actividad en esta área pueden distinguir a una persona altamente inteligente.
Asimismo, los científicos descubrieron que el tamaño las conexiones neurales entre la parte izquierda de la corteza prefrontral lateral y el resto del cerebro también predicen la inteligencia individual.
En total, estos factores establecen lo que los científicos llaman la “conectividad cerebral global”, con la cual, dicen, se puede establecer una nueva forma de entender la inteligencia humana.
Conectividad neural
Para el estudio los investigadores sometieron a los participantes a escáneres de imágenes de resonancia magnética funcional, fMRI, mientras descansaban pasivamente.
“Nuestra investigación demuestra que la conectividad en una región particular de la corteza prefrontal puede predecir qué tan inteligente es una persona”
Dr. Michael Cole
Posteriormente los participantes llevaron a cabo varias tareas para medir su inteligencia -basadas en su capacidad para razonar rápidamente y usar el pensamiento abstracto- y tareas de control cognitivo para calcular sus niveles de conectividad cerebral.
Los resultados de ambas pruebas fueron “consistentes”, dicen los científicos, y mostraron tanto una mayor actividad en la corteza prefrontal como niveles más altos de conectividad neural.
Tal como explica el doctor Michael Cole, neurocientífico cognitivo que dirigió el estudio, ésta es la primera vez que un estudio muestra “evidencia convincente” del poder de las conexiones neurales del cerebro y el procesamiento cognitivo que subyace en la inteligencia humana.
Y esto puede observarse en un escáner cerebral.
“Nuestra investigación demuestra que la conectividad en una región particular de la corteza prefrontal puede predecir qué tan inteligente es una persona” dice el doctor Cole.
El estudio, explican los investigadores, sugiere que ser inteligente significa, en parte, tener una corteza lateral prefrontal “que hace bien su trabajo”.
Y esto a su vez significa que esta región puede comunicarse efectivamente con el resto del cerebro.
Aunque todas las regiones del cerebro contribuyen al procesamiento cognitivo, la corteza prefrontal lateral es la encargada de coordinar todos los procesos que se están llevando a cabo y a mantener la atención en la tarea que un individuo realiza.
“Es muy similar a la forma como el conductor de una sinfonía controla y modula la ejecución de una orquesta” explican los autores.
Tal como señala el doctor Cole “hay evidencia de que la corteza prefrontal lateral es la región del cerebro que “recuerda” los objetivos e instrucciones que te ayudan a seguir haciendo lo que se necesita hacer cuando estás llevando a cabo una tarea”.
“Así que tiene sentido que el hecho de que esta región se comunique efectivamente con otras regiones (del cerebro) te ayudará a completar tus tareas inteligentemente” agrega.
El hallazgo, dicen los científicos, no sólo tiene implicaciones importantes para el entendimiento de la inteligencia humana.
También ofrece información valiosa sobre cómo las averías en esta conectividad cerebral global contribuyen a los déficit del control cognitivo, como los que resultan en trastornos como la esquizofrenia y otras enfermedades mentales, agregan los investigadores.