Demasiada información en la cabeza al acostarnos perjudica la salud de nuestro sueño
- El ‘síndrome de fatiga informativa’ puede afectar a la cantidad y calidad del sueño.
- Si nos encontramos más irritables, de mal humor y con problemas de sueño, podemos estar sufriendo este síndrome.
- Tres horas antes de dormir: desconectarse del móvil, Internet y las redes sociales.
Nunca tuvimos tanta información y tan fácil acceso a ella. Pero hasta eso debemos saber medirlo, regularlo en función de nuestras necesidades. Un exceso de información en nuestra cabeza nos altera y repercute en la calidad de nuestro descanso, del sueño, y éste es fundamental para nuestra salud, tanto como comer o beber.
La sobreinformación causa el llamado ‘síndrome de fatiga informativa’, un mal que puede repercutir en la cantidad y calidad del sueño. Como explican desde la Unidad de Alteraciones de Sueño del Instituto Dexeus (Barcelona), este síndrome se refiere al efecto negativo que tiene la sobreinformación como fuente de estréspara nuestro cerebro.
Eduard Estivill, responsable de esta unidad, aclara que todo tipo de información puede provocarlo, no solo las malas noticias. Pero según este doctor la continua exposición a malas noticias por parte del espectador, lector u oyente, incrementa el número de casos: “No solo se puede incrementar sino que es realmente causante de esta situación”.
Los medios, opina, “no son los culpables, solo un elemento más del engranaje social. Informar es básico, o sea que no podemos cuestionar a los medios de comunicación. No es tanto el tipo de noticias, sino la sobrecarga de ellas, aunque evidentemente los casos positivos siempre proporcionarán un mayor bienestar y, sobre todo, menos tensión o ansiedad”.
El ‘síndrome de fatiga informativa’ afecta a todos y a todas las edades: “Incluso a niños y adolescentes porque se trata de estímulos externos que llegan a nuestro cerebro, causando este estado de aumento de tensión y confusión”.
Esta patología no cuenta, en palabras de este experto, con un “diagnóstico reconocido” en los manuales médicos “pero la situación existe”. Sus consecuencias principales son “ese estado de tensión continuo que podemos sufrir durante el día con su repercusión sobre la cantidad y calidad del sueño”.
Cómo prevenir el exceso de información
¿Cabe prevenir esta tensión mental que crea la continua exposición a las noticias? Estivill apuesta por “filtrar el tipo de información”, especialmente si el destinatario va a ser un menor. “En los adultos es más difícil porque llega por todos los medios, sobre todo las redes sociales que se sobreutilizan para fines informativos”, asegura.
Para el doctor, pese a que todo el mundo está expuesto a esta sobreinformación no todos sufren las consecuencias. “Hay personas que manejan mejor el estrés causado por la sobreinformación”, precisa este experto, para quien, en el caso de que la persona se note “más irritable, de mal humor y con problemas de sueño, es posible que estemos afectados por esta situación”.
“El cerebro necesita desconectar para poder dormir”, dice Estivill, y este desconectar se refiere a muchos aspectos, también al uso tan intenso que hacemos de las redes sociales.
Desde la Unidad de Alteraciones de Sueño del Instituto Dexeus se aconseja que, al menos tres horas antes de acostarnos, apaguemos el móvil, desconectemos de las redes sociales y no consultemos Internet.