Cosas que el dinero no puede comprar
Hemos escuchado que todo el dinero no compra la felicidad muchas veces, pero cómo no tenemos “todo el dinero” pues no lo creemos. Al menos, hay más de uno que lo duda porque sabe que con dinero puede, por lo menos, saldar algunas deudas y vivir holgadamente.
Y es que, un billón de dólares puede comprar muchas cosas: extravagantes mansiones, lujosos autos, viajes por todo el mundo, yates… ¡Y todo lo que te imagines! Incluyendo fama, poder y hasta la gran oportunidad de ayudar a otros. Pero aun así, parece que el dinero no puede comprar todo, por lo menos no la felicidad.
De acuerdo con una de las revistas más importantes del mundo, especializada en negocios y finanzas Forbes, en su versión digital, nos dice que hay tres cosas en este mundo que el dinero no puede comprar. ¿Ya te imaginaste algunas?
1. Felicidad. Aunque seamos escépticos, el dinero no puede comprar la felicidad o la tranquilidad, pues según un estudio realizado por los profesores de la Universidad de Princeton Daniel Kahneman y Angus Deaton, las personas necesitan mucho menos que un billón de dólares para lograrlo; necesitan 75 mil dólares. Esto, depende claro, de cuál sea nuestro concepto de felicidad. Cuando esta se define como un estado de ánimo del día a día, es probable que sí logre dar felicidad, pero cuando se trata de la búsqueda de satisfacción general, es probable que no lo haga porque entre más dinero tengamos, es posible que más problemas también. Conflictos que a diario tienen que ser resueltos y que por más dinero que tengamos y deleguemos obligaciones, siempre habrá que tomar decisiones.
2. Cordura. El dinero no nos garantiza tener una vida bien dirigida, incluso puede ser lo contrario y representar una fuente de “locura” peligrosa. Recordemos que “el dinero es una condición necesaria pero no suficiente para la vida, la felicidad y la sabiduría”, ya lo dijo Esquilo. Hacer un uso racional de los recursos propios y nuestra sabiduría, nos ayudará a llevar una vida equilibrada, porque lujosas mansiones y autos, no garantizan la paz mental.
3. Amistad. La verdadera no. La unión recíproca debe ser nutrida por gestos de amistad y confianza, y aunque el dinero puede comprar “detalles” materiales, no puede compensar por tener una verdadera amistad. Y una vida sin amigos es una vida sin satisfacción.