10 razones saludables para masticar chicle
¿Qué pasa si te tragas goma de mascar? ¿El chicle puede desgastar mis dientes? Conoce las respuestas a estas y otras preguntas.
El ser humano siempre ha tenido una extraña fascinación por masticar cosas que no son alimentos. Desde una corteza de árbol en la prehistoria hasta los tapones de los bolígrafos actuales.
Uno de los masticables favoritos es sin duda el chicle, que fue consumido por los mayas de la Península de Yucatán hace cientos
de años con fines saludables.
Y aunque parece que el chicle no da ningún beneficio sino que, por el contrario, puede dañar los dientes o el estómago, estas ideas son erróneas.
Conoce los múltiples beneficios que aporta la goma de mascar.
1. Algunos científicos sugieren que masticar chicle estimula la memoria, la concentración, reduce la ansiedad y el estrés, y puede ayudar a combatir la demencia. Al parecer, la memoria mejora porque al masticar se liberan hormonas antiestrés.
2. El ejercicio realizado mediante el acto de masticar aumenta la frecuencia cardiaca en 3 latidos por minuto, por lo que el cerebro recibe mayor flujo de sangre. Otra consecuencia es que se llegan a quemar de 8 a 12 kcal por hora masticando chicle.
3. Al masticar se libera insulina, como un reflejo condicionado. Esta sustancia, además de procesar los azúcares que se ingieren, está relacionada con la prevención del Alzheimer.
4. De acuerdo con algunos estudios, cuando masticamos, nuestros niveles de cortisol (la hormona del estrés) se reducen en un 16%.
5. Los chicles sin azúcar son benéficos para la salud bucal, ya que al masticar provocamos un mayor flujo de saliva a la boca, que neutraliza los ácidos de los alimentos y evita que desarrollemos caries o enfermedades bacterianas.
6. Es posible que los chicles de menta puedan ayudar a combatir las náuseas, pero si se consume chicles en exceso (más de 4 al día), aumenta la probabilidad de desarrollar gastritis, trastornos gastrointestinales, diarrea y hasta úlceras.
7. Masticar chicles sin azúcar ayuda a reducir el apetito. Los chicles sin azúcar se inventaron en 1950.
8. Hace algunos años corrió el rumor de que el acetato de vinilo utilizado en la goma base podía causar cáncer. Sin embargo, recientemente se demostró que esta sustancia es inofensiva.
9. Es conveniente no excedernos al masticar goma de mascar, ya que si lo hacemos por demasiado tiempo o ejercemos fuerza en demasía, podemos lastimar o dañar las articulaciones de la mandíbula.
10. Por otro lado, las hojas del nispero tienen efectos antidiabéticos, antioxidantes y pueden reducir el colesterol. Sus semillas tienen sustancias que inhiben el crecimiento de ciertas bacterias.
11. Si nos tragamos un chicle, contrariamente a la leyenda urbana, éste no se pega en el estómago, sino que se desecha pues no es posible digerirlo.