Cosas que no debes hacer en la cena de navidad de la empresa

Las cenas de empresa son una tradición navideña para desconectar un poco del entorno laboral, y poder así conocer mejor al resto de compañeros de trabajo. Sin embargo, la cena de empresa de navidad puede suponer el principio del fin de muchas buenas relaciones laborales, por eso es fundamental saber previamente cómo comportarse en este tipo de eventos. Muchos empleados se sientan con sus jefes por primera vez sin saber cómo actuar correctamente.

NO BEBER COMO SI FUERA EL ÚLTIMO DÍA DE TU VIDA

Beber o no beber, ese es el gran dilema de la cena de empresa. Es cierto que nadie está obligado a beber, pero también resultaría muy extraño no tomarse ni una copa o aunque sea mojarse un poquito los labios. Es importante que tengas presente que no te encuentras en el cumpleaños de un amigo, con lo que pillarse la cogorza del siglo puede costarte la etiqueta de ‘borrachín de turno’. Una etiqueta nada recomendable. Es aconsejable beber agua en abundancia y comer lo suficiente para tomarse una copa o un par sin traspasar la ‘delgada línea roja’. Todo el mundo es consciente de esta regla de oro que suelen saltarse en el último momento.

NADA DE VESTIMENTAS EXUBERANTES NI TAMPOCO EXCESIVAMENTE RECATADAS

La virtud siempre está en el término medio, con lo que nada de vestirse como si la boda de tu mejor amigo se tratase ni demasiado informal como en las fiestas de tu pueblo. Recuerda que una imagen correcta es la mejor carta de presentación delante de tus jefes y directivos. Elige algo discreto y recuerda que siempre es mejor quedarse corto que pasarse. No querrás ser la comodilla durante meses por esa camisa que te quedaba ’embutida’ o por ese escote provocador.

NO PUEDES FALTAR

Aunque no seas un gran fan de acudir a este tipo de ‘saraos’, y seguro que tienes mejores planes que hacer, no te puedes librar. Se trata de eventos de empresa y se espera que todos los empleados acudan, ya que la ausencia se podrá interpretar como una falta de responsabilidad o de poco compromiso. El hecho de no asistir a este tipo de eventos suele ser de los temas más comentados, algo que quieres evitar a toda costa.

NO SEAS EL ÚLTIMO EN IRSE

Recuerda que una retirada a tiempo es una victoria, sobre todo si se trata de una cena de empresa. Si al día siguiente tienes trabajo, te puede servir de excusa para lanzar una pequeña ‘bomba de humo’ antes de que el alcohol empiece a hacer efecto a la mayoría de los presentes, aunque nunca te vayas antes de haberse acabado los postres. No es el día para gritar “la última y nos vamos”.

NO COMAS COMO UNA LIMA NI COMO UN PAJARITO

La educación a la hora de comer es primordial, no puedes dar la impresión de llevar una semana sin comer. Nada de comer con ansia y preguntar al de al lado si “¿te vas a comer esto?”. Tampoco es buena idea quejarnos de la comida aunque no nos guste, hay que hacer el esfuerzo de probar un poco de todo, aunque sea por cortesía. No olvides que el pan está a nuestra izquierda y a bebida a la derecha.

PROHIBIDO LIGAR

No tiene nada que ver ‘liarse’ con un compañero de trabajo que con alguien desconocido, sobre todo si queremos evitar los típicos corrillos plagados de interminables cuchicheos. Si de verdad te gusta algún compañero de trabajo es mejor que busques otro momento, que sea algo más privado. Sobre todo por tu reputación. Según una encuesta del portal de encuentros para aventuras extramatrimoniales Ashley Madison, las cenas de empresa son el momento más esperado del año para tener una aventura y de hecho, el 38,3 por ciento de las mujeres han mantenido una aventura de una noche con un superior y 6 de cada 10 hombres han sido descubiertos teniendo un lío amoroso con una compañera de trabajo.

NO HABLES DE CUALQUIER COSA

Estas cenas no son el mejor lugar para ponerse a discrepar, todo lo contrario, aprovéchalas para limar asperezas, sin tomarse demasiadas confianzas, sobre todo con los superiores. Así que no seas demasiado abierto y no hables más de la cuenta, sobre todo prudencia. Tampoco entres al trapo en temas delicados como la política o la religión. Es un buen momento para desconectar del trabajo así que olvídate de recurrir a los temas laborales.

NO TODAS LAS FOTOS SON PRESENTABLES

No es aconsejable dejarse fotografiar en ciertos estados, si has bebido mejor evítalo. Recuerda que todas las fotos de la cena pueden acabar circulando por Twitter, Facebook o Whatsapp, y tarde o temprano las acabará viendo tu jefe. También hay que evitar publicar las imágenes en las que se pueda ridiculizar a algún compañero. Moderación al igual que con la bebida sino quieres arrepentirte al día siguiente.

Fuente: Que.es