Consejos para unos dientes más saludables
La sonrisa es una de las áreas más bonitas del rostro y del cuerpo, seas hombre o mujer. Puedes enamorar, divertir, llamar la atención o irradiar felicidad si sonríes. Entonces, ¿Qué mejor que conocer las siguientes recomendaciones para unos dientes más saludables? Tendrás una sonrisa irresistible vayas donde vayas.
Consejos para tener dientes (y boca) más sanos
La boca es uno de los instrumentos que más usamos a diario: para comer, para beber, para hablar, para besar, para sonreír. Por esta razón, es preciso que la mantengamos en excelentes condiciones. ¿Cómo? Con las siguientes ideas:
Dile adiós a los “manchadores”
Si quieres tener dientes blancos como los de la publicidad de dentífrico, será mejor que dejes de lado ciertos hábitos o alimentos que los manchan. El vino tinto, el café, el té negro, los cigarrillos, las salsas y los refrescos son los peores enemigos de tu boca. Cuánto más los consumas, más amarillas tendrás las piezas dentales.
Esto no quiere decir que dejes de disfrutarlos si tanto te gustan, pero siempre con moderación (a excepción del cigarrillo: en lo posible, debes tratar de eliminar el vicio por completo). Después de comer o beber alimentos y bebidas de color oscuro, cepíllate los dientes. Y si quieres un blanqueador natural, los dos más beneficiosos son la manzana y el bicarbonato de sodio.
Cambia el cepillo dental regularmente
Los odontólogos indican que cada dos o tres meses tenemos que desechar el cepillo dental y comprar uno nuevo para evitar transferir las bacterias a tu boca. Elige un cepillo que sea de cerdas finas para evitar dañar o lastimar las encías, sobre todo si sufres de gingivitis.
Los doctores recomiendan cepillar en un ángulo de 45° contra las encías y siempre con movimientos circulares, no de arriba para abajo. No apliques demasiada fuerza en los dientes.
No te olvides de limpiar la lengua
Todos nos preocupamos de tener unos dientes blancos y relucientes que brillen en la oscuridad pero no de una compañera como es la lengua. Algunos cepillos dentales tienen en la parte trasera de las cerdas una especie de “raspador”. Úsalo a partir de ahora para quitar todos los residuos de la lengua.
Durante la noche, la saliva se acumula allí y forma la placa bacteriana, una de los principales causas del mal aliento o halitosis. El raspado diario de la lengua también se puede hacer directamente con las cerdas del cepillo, con o sin dentífrico, siempre con suavidad.
Come alimentos “blanqueadores”
Además de la manzana, que es el limpiador por excelencia (si la comes cruda y con cáscara), también puedes optar por al apio o la zanahoria. Siempre se deben consumir crudos y comerlos cortándolos con los dientes delanteros.
Algunos dentistas recomiendan dejar estos alimentos como último bocado después de almorzar o cenar si es que no puedes cepillarte los dientes.
Realiza gárgaras con vinagre
El vinagre de manzana tiene muchas propiedades. Una de ellas es la capacidad para blanquear los dientes. Cada mañana, mezcla en un vaso de agua caliente o tibia una o dos cucharadas de vinagre.
Úsalo como si fuera un enjuague bucal o para hacer gárgaras. Te ayudará a quitar las manchas de los dientes y a blanquearlos, así como también a eliminar todas las bacterias que se acumulan entre las muelas, las encías y la lengua.
El bicarbonato, otro aliado de la salud dental
Como ya se dijo antes, el bicarbonato de sodio sirve para blanquear los dientes y muelas, sobre todo si consumes demasiados alimentos manchadores. En lugar del dentífrico habitual, coloca un poco de bicarbonato en el cepillo y realiza la limpieza como de costumbre.
No abuses tampoco de sus bondades, porque puede irritar las encías si es que son sensibles o bien raspar demasiado la dentina de las piezas. Puedes repetir cada tres días.
Mantén tu aliento “siempre fresco”
Parece que estamos haciendo publicidad de un dentífrico, pero no es así. Para saber si tienes mal aliento puedes exhalar sobre tu mano y oler el “aroma” que dejas. También puedes sentirlo en tu propia boca (aunque algunas personas no se dan cuenta). Puedes masticar una hoja de menta, por ejemplo, si deseas una solución más natural (o una infusión, que además será buena para tu digestión).
¡Da la bienvenida al hilo dental!
No son muchas las personas que lo utilizan, pero es totalmente necesario. Si aprendes a usar bien el hilo dental, podrás eliminar todos los restos de comida entre tus dientes, para una sonrisa mucho más bonita y saludable. Al principio necesitarás un espejo para guiarte, pero después podrás hacerlo solo. ¡No dudes tener un equipo completo en el bolso, el coche o el escritorio de la oficina y usarlo cuando sea necesario!
(Consejo para mujeres) Disimula con maquillaje
Mientras los remedios caseros y los cambios de hábito para tener dientes más blancos y sanos dan resultado (no es de un día para el otro, sobre todo si están muy manchados), puedes ponerte un labial de color coral medio o rojo claro.
Estos tonos harán que los dientes parezcan más blancos. Evita los tonos muy claros porque resaltarán el color amarillento, así como también los rojos demasiado “furiosos”.
Bebe usando una cañita de plástico o sorbete
Como ya se dijo antes, muchas bebidas causan manchas en los dientes, como es el caso de los refrescos o los zumos industriales. Para evitar que el esmalte dental esté cada vez más marrón, deberás evitar el contacto con los líquidos oscuros. Si bien es verdad que con bebidas como el café, el té o el vino es un poco complicado, hazlo al menos con las gaseosas.
Cepilla tus dientes de dos a tres veces al día
Los momentos “críticos” para cepillarse los dientes a diario son dos: la mañana y la noche. Es decir, cuando te levantas y cuando te vas a acostar.
Por la mañana porque la saliva se seca mientras dormimos (y esto producecaries, entre otras cosas), causando mal aliento, y por la noche porque es mejor eliminar los restos de alimentos antes de ir a la cama. Y como tercer cepillado, después del almuerzo, para evitar que se formen las caries o tengamos halitosis.