Nunca hagas estas cosas en Facebook
A menudo utilizamos las sin ser demasiado conscientes de los riesgos a los que nos exponemos… Hacemos un repaso de las principales precauciones que deberías tomar en para no llevarte sustos.
Desde que aterrizó en España en 2007 Facebook es la red social que más adeptos ha logrado entre los españoles: cuenta con 18 millones de en nuestro país y, según una encuesta de Spain, la gran mayoría la utilizan además a diario. Pero la clave es ¿la utiliza bien?
A menudo no somos conscientes como usuarios de que lo que creemos un espacio privado es en realidad un lugar de exposición pública en el que nuestro actos pueden tener consecuencias no deseadas. Por eso es importante tener en cuenta algunas precauciones:
1- Navegar en Facebook sin revisar la configuración de privacidad:
Revisar la configuración de privacidad es esencial para saber qué de contenidos puedes publicar sin llevarte un disgusto. Para ello debes visitar el menú de Configuración y, como primer paso, decidir si tus publicaciones serán vistas en ‘Público’ o solo por tus ‘Amigos’. Facebook ha habilitado un menú rápido al que podrás acceder arriba en un icono con un candado. Además de revisar quién ve tus publicaciones, puedes ver cómo ven los demás tu perfil (y editarlo) o revisar las publicaciones en las que se te ha etiquetado. También es importante revisar si se te puede escribir o no: puedes hacer que Facebook filtre de modo que solo tus amigos puedan enviarte mensajes. De la misma forma, puedes pedirle a Facebook que solo los amigos de amigos puedan pedirte amistad.
2.- Publicar cosas tuyas sin pensar:
A pesar de que tu configuración de privacidad sea segura y sólo compartas cosas entre amigos, piensa que estás subiendo información a un espacio público en el que muy fácilmente puedes perder el control sobre tus datos. Tus amigos y los amigos de estos podrían compartir tus estados o comentarlos divulgando información que en realidad no quieres que se conozca. Como datos personales, o cuestiones que simplemente afectan a tu privacidad.
3. – Publicar datos personales ajenos:
Quien dice datos personales dice también imágenes o información que pueda resultar hiriente para la persona afectada o bien desvelar aspectos de su vida que pertenezcan al ámbito de su intimidad. Podrías estar incurriendo en un delito contra la intimidad (además de en una práctica muy poco ética). Si tienes dudas, no hables de otros.
4. – Subir fotos tuyas ridículas:
Puede que después de la fiesta de Nochevieja te haga mucha gracias, pero una vez que subimos contenidos a la nube, insistimos, perdemos el control sobre los mismos. ¿Quién te dice que no va a salir a la luz esa imagen vergonzante el día que estés buscando otro trabajo? Según un estudio, el 73 por ciento de los reclutadores revisan las redes sociales. Nada que imágenes borracho, no digamos ya de contenido sexual.
5.- Subir fotos de tus hijos:
Es muy tentador compartir una imagen divertida o enternecedora de nuestro hijo, pero la recomendación de todas las asociaciones especializadas, como Protégeles, es evitarlo a toda costa. El motivo principal es el expuesto en el caso anterior: una vez subida la imagen perdemos el control sobre la misma y no sabemos en qué manos puede terminar. Por otra parte, se cuestiona hasta qué punto pueden los padres disponer de la imagen de sus hijos.
6.- Pinchar en un vídeo o un enlace en el que se han etiquetado y no sabes qué es:
Es una de las fórmulas que utilizan los virus para propagarse en la red social: de pronto recibimos una notificación que nos avisa de que nuestro nombre ha sido etiquetado en una publicación de un amigo. Puede que no entendamos a priori el enlace o el vídeo que ha colgado y nos veamos tentados a pinchar. ¡Error! En ese momento te habrás infectado y etiquetarás sin querer a todos tus amigos. Te vas a hinchar a pedir disculpas… Eso les pasó justamente hace poco a quienes cayeron en la trampa del falso vídeo porno.
7.- Aceptar a todo el mundo:
Tener más y más amigos no siempre es lo dsseable en Facebook. No solo porque es una imagen falsa de la realidad ( sui está solo, estás solo), sino porque te pude encontrar con gente indeseable. Algún ‘troll’ que decida amargarte la vida con insultos o ridiculizando cada publicación que haces. ¡Bloquéale! No te lo pienses. Más vale un bloqueo a tiempo que sufrir un acoso que probablemente irá in crecendo. Para ello, en el mismo menú de acccesos directos a publicidad tienes un menú directo en el que incluir el nombre de la persona o su correo electrónico.
8.- Invitar a todo el mundo a tu fiesta de cumpleaños:
Peude parecer una obviedad, pero al gente está muy loca y se deja llevar por el entusiasmo. Aunque no sean amigos del alma, si dices que das copas gratis en tu casa lo más probable es que todo el mundo se suba al carro y termines teniendo un problema… le pasó a una adolescente holandesa, en 2012, en cuya fiesta se presentaron 4.000 personas. Por supuesto, acabó en disturbios con la Policía.
9.- Darle tu contraseña a tu novio…
O a tu padre, o a tu mejor amiga. En serio, por mucha confianza que tengas no es buena idea. nunca sabemos lo que nos depara el futuro y tener a una persona que pueda hacerse pasar por ti no es una buena opción. Deberías hacer repaso mental por si acaso has cometido ya ese error y, si es así, tratar de subsanarlo rápidamente: cambia tus claves.
10.- Aceptar a ese familiar pesado:
Puede ser tu madre, tu cuñada, algún tío lejano… Todos tenemos algún personaje familiar al que sabemos que es mejora alejar de nuestras amistades, así que por muy comprometido que te sientas ¡no lo aceptes! Ya se te ocurrirán buenas excusas con las que mantenerle a raya en el próximo evento familiar en el que os tengáis que encontrar; pero si lo aceptas ahora tu decisión puede tener consecuencias irreparables.
Fuente: Quees