Las leyendas de “El Príncipe de Bel Air”… aclaradas por Jazz 25 años después
“El Príncipe de Bel Air” se estreno hace nada menos que un cuarto de siglo. El éxito que alcanzó fue tal, que sigue muy presente en la memoria de los que vieron la serie… y de los que no. Y es que, su fama fue tan gigantesca que durante las temporadas que estuvo en antena generó unas cuantas leyendas populares, algunas realmente descabelladas.
Hoy, 25 años después, uno de los actores secundarios y más populares de la serie, el rapero Jeffrey Townes (Jazz en la serie) ha decidido aclarar todos esos mitos, desmintiéndolos totalmente en la mayoría de los casos, en una entrevista concedida a «The Huffington Post».
La invención del saludo de Will y Jazz
Según Townes, es falso a medias que Will Smith y DJ Jazzy Jeff inventaran el peculiar saludo de sus dos personajes en la serie. El mérito hay que dárselo a uno de los bailarines que ambos llevaron en una de las muchas giras que realizaron como «DJ Jazzy Jeff and The Fresh Prince». Ambos eran uno de los dúos de hip hop más populares del momento (gracias precisamente a la serie), a principios de los 90.
El bailarín en cuestión se llamaba Mike Barr, que es quién empezó a hacer el saludo. Las dos estrellas lo único que hicieron fue tomarlo prestado y convertirlo en un fenómeno mundial. El personaje de Will lo realizaba con otros personajes de «El Príncipe de Bel Air», pero Jazz, en cambio, asegura que no podía hacerlo «con nadie que no fuera él».
Quincy Jones, el taxista de los créditos
Es absolutamente falso que el famoso productor discográfico y responsable de algunos de los discos de más exito de Michael Jackson, Quincy Jones, fuera el taxista que aparecía en la cabecera dejando a Will Smith en la casa del Tío Phil.
Jones, que era además productor ejecutivo de la serie, no era el protagonista de la letra del tema que abría cada capítulo: «Llamé a un taxi, cuando se acercó / su molonga matrícula me fascinó. / Quería conocer a la clase de parientes / que me espera en Bel Air con aire sonriente. / A las siete llegué a aquella casa / y salí de aquel taxi que olía a cuadra. / Estaba en Bel Air y la cosa cambiaba / mi trono me esperaba, el príncipe llegaba»
Will Smith, arruinado
Otra de los rumores surgidos en estos 25 años aseguraba que la serie se grabó, porque Will Smith estaba en la bancarrota. Una leyenda que Jazz ha negado… a medias. Es cierto que el actor tenía una importante deuda con Hacienda, cuando la NBC le propuso ser el protagonista de «El Príncipe de Bel Air». Él mismo lo confesó en el programa de James Lipton, «Inside the Actors Studio».
Sin embargo, lo que llevó a los productores a elegir a Smith para el proyecto no fue solventar las deudas del actor, sino verle en el videoclip del tema «Parents Just Don’t Understand», cuyo estética y temática es muy similar al de la cabecera de la serie. «Tras verlo, pensaron que Will podía llevar a buen puerto el la serie», recuerda Townes.
La expulsión a Jazz en la cabecera
También es falso a medias, tal y como se dijo, que la escena en la que Jazz era pateado y expulsado de la casa de su tío en Bel Air fuera rodada una sola vez. Esa escena, que se repetía una y otra vez sin apenas veriación, fue rodada en varias ocasiones más.
«Cuando lo hice por tercera o cuarta vez, y piensa que cada toma se repetía unas cuarenta veces, dije que no podía hacerlo más», recuerda Townes, rememorando las múltiples contusiones que sufría durante el rodaje. Por esta misma razón, se usó siempre el mismo corte de todos los que grabaron.
Will estaba muerto y Bel Air era el cielo
Esta fue una de las leyendas populares más extrañas surgidas alrededor de la serie: la que aseguraba que todo lo que ocurría desde que Will llegaba a Bel-Air transcurría tras la muerte del protagonista, a causa de una pelea en su barrio de Philadelphia. De esta forma, la casa de los Banks era una metáfora del cielo.
Según Jeffrey Townes, esto era totalmente falso. Tal solo fue una fantasía de los seguidores de la serie. «No era tan profunda, pero es increíble cómo el cerebro de los fans les llevó a sacar esas conclusiones», bromeó el DJ, que también desmientió que, aunque el «Príncipe de Bel Air» sea bastante autobiográfico, esa pelea tampoco se produjo en la vida real de Smith: «Es muy aficionado a contar batallitas», afirma Townes.