Los Héroes de la Expedición de Constanza, Maimón y Estero Hondo
Era de mañana, aquel 14 de junio de 1959, cuando en medio de la cotidianidad, unas bombas cayeron en tierra, señal inequívoca de que algo no andaba bien. Para entonces, la República Dominicana se hallaba oprimida por un régimen dictatorial que había subyugado al país al antojo del tirano Rafael L. Trujillo. Fue precisamente por esto que llegaron al país 198 expedicionarios, convirtiéndose en el detonante que pondría fin a la dictadura.
Pero, lejos de todos los episodios épicos de esta porción de la historia, que fue vilmente manipulada por el régimen para simular una invasión, en esa expedición arribaron 198 individuos con coraje, valentía y mucho patriotismo. Los Héroes del 14 y el 20 de junio, estaban constituidos por 153 dominicanos, 22 cubanos, 13 venezolanos, 5 puertorriqueños, 2 norteamericanos, 2 españoles y 1 guatemalteco.
Suelen a menudo sepultarse en el recuerdo la labor patriótica, la entrega y la valentía de estos hombres que se lanzaron por aire y mar a un país blindado por la tiranía. Desde perspectiva militar, la expedición fue fallida, pero fue el punto de partida, la chispa que encendió la hoguera en el corazón de cientos de dominicanos que se at revieron a desafiar el régimen y enfrentar las consecuencias.
Los expedicionarios, se reunieron en Cuba y recibieron entrenamiento de guerrillas con el apoyo de Fidel Castro, llegaron al país al mando de Enrique Jiménez Moya y su arribo fue sorpresivo y estruendoso. Popularmente, la gente se refiere a la expedición como la guerra de los “barbudos” y en el recuerdo de quienes vivieron los momentos en que los aviones bombarderos sobrevolaron la costa norte, “aquello era inexplicable, la gente no entendía que pasaba y cayó una bomba en Sosúa, cerca del antiguo cuartel de la guardia y la gente se guareció en sus casas atemorizada” dice María Polanco quien tenía apenas siete años, a la llegada de los expedicionarios.
En aquellos tiempos, la comunicación mediática en la sociedad dominicana era bastante restringida y distorsionada por el régimen, por esto inicialmente la gente creyó que se trataba de una invasión de comunistas, pero pronto se supo la verdad.
Los hombres que llegaron a Constanza, Maimón y Estero Hondo en Puerto Plata, tenían claro que se enfrentarían a un ejército aun mayor que el contingente que ellos conformaban, pero sabían que su sacrificio daría frutos, solo que no fueron inmediatos. La gran mayoría de los expedicionarios fue vilmente asesinada, fueron apresados, torturados y sepultados en fosas comunes, como una gran masa sin valor.
Pero ahora, sus nombres refulgen en las páginas de la historia, como los hombres que dieron pie a la encarnizada rebelión contra el dictador. El Movimiento de Liberación Dominicana que representaban los expedicionarios, dio lugar, posteriormente, al Movimiento Clandestino 1J4 que integraba a Manolo Tavárez Justo, las Hermanas Mirabal, Leandro Guzmán y otros tantos, de carácter revolucionario y libertador que seguía el ejemplo de los expedicionarios.
Hoy a 56 años de la hazaña, sobreviven Mayobanex Vargas y Delio Gómez Ochoa, dominicano y cubano respectivamente, que se han vuelto a la fecha libros abiertos con auténticos relatos que han permitido reconstruir en la memoria nacional la Gesta Heroica del 14 de junio. Es nuestro compromiso, como generación emergente, rescatar y preservar la memoria de aquellos caídos físicamente en las fauces del régimen y resucitados en el corazón del pueblo que a precio de sangre obtuvo la liberación de la tiranía.