¿Estar tumbado en la playa es bueno para la columna vertebral?

Llegan las vacaciones y el buen tiempo y con él los largos periodos tumbados bajo el sol en la playa o en la piscina. Sin embargo, lejos de poder descansar, en numerosas ocasiones nos levantamos con dolor de espalda. La playa puede ser el sitio ideal para descansar, pero si no hacemos las cosas bien, podemos salir más perjudicados que beneficiados.

Mónica García Mateos, Profesora del Departamento de Fisioterapia de la Universidad Europea, explica a ABC que «no nodebemos descuidar nuestra postura y lo ideal sería que nuestra columna se mantuviera recta y sus curvas no sufrieran modificaciones». Así, esta fisioterapeuta de la Selección Nacional Femenina de Balonmano recomienda tener en cuenta algunos aspectos:

1. Superficie:
La superficie debe ser firme y recta, en cuanto a que no debe tener la forma de una hamaca, pero debe ser suficientemente blanda como para adaptarse a las curvas de la columna (cifosis y lordosis). Una superficie excesivamente dura es tan perjudicial como una demasiado blanda. Un colchón de agua, si su firmeza se ajusta adecuadamente, es aceptable. Si no hay, conviene alisar la arena antes de extender la toalla.

2. Postura:
Al estar acostado es mejor situarse boca arriba. Dormir boca abajo no es recomendable, pues al hacerlo se suele modificar la curvatura de la columna lumbar y, para poder respirar, se debe mantener el cuello girado. Y lo mismo ocurre en la playa. Si no se puede estar en otra postura, se debería intentar hacerlo ligeramente de costado. Si, por ejemplo, se girase hacia el lado izquierdo, deberá flexionar la cadera y la rodilla derecha, aun manteniendo estirada la izquierda, y procurar girar los hombros y adaptar del cuello en relación a la columna dorsal, lo más parecido posible a la que forman al estar de pie.

3. Almohada y reposa pies:
Boca arriba la almohada relativamente fina debe asegurar que la columna cervical forma con la columna dorsal el mismo ángulo que al estar de pie. Si se está tumbado sobre un hombro la almohada gruesa o enrollada debe mantener el cuello en el eje de la columna dorsal asegurándose que no caiga. También sería recomendable poner una pequeña almohada debajo de las rodilla cuando estemos tumbados boca arriba para tener protegida la zona lumbar. Y si no se dispone de almohada, se puede hacer una con la arena debajo de la toalla

Recuerde que descansar es sinónimo de higiene postural pero no olvide protegerse del sol con las medidas de protección más adecuadas.

Fuente: ABC.es