Investigación: Una brecha para el abordaje de males de la visión
El glaucoma es la segunda causa de ceguera en el mundo, según datos ofrecidos por la Organización Mundial de la Salud.
Debido a que se trata de una enfermedad generalmente asintomática, es muy difícil que la persona identifique lo que tiene y busque la ayuda necesaria, además de que las técnicas que se utilizan en la actualidad para detectarla lo hacen cuando ya se ha perdido un 25 por ciento de la visión.
Esa problemática fue lo que movió a la joven dominicana María Virginia Castaños a realizar una investigación enfocada en cómo el glaucoma afecta los nervios de la retina y cómo a través de las nuevas técnicas se pueden detectar cambios que permitan el diagnóstico de la enfermedad antes de causar daños a la vista.
Para dicho estudio Castaños utilizó tecnologías de última generación, como la Tomografía de Coherencia ”ptica Angiografía (OCTA), que permite tener imágenes de los vasos de la retina sin necesidad de contraste y tomó como muestra 42 pacientes afectados con la enfermedad del laboratorio de imagenología avanzada de retina del hospital New York Eye and Ear Infirmary of Mount Sinai, en el que labora.
Según la profesional egresada de Medicina de la Universidad Iberoamericana (Unibe), el proceso no fue nada fácil, sobre todo porque disponía de muy poco tiempo; llegó a Estados Unidos en octubre del año pasado y tuvo que empezar a trabajar al instante, ya que debía tener algo listo en noviembre para presentarlo ante las autoridades de la Asociación para la Investigación en Visión y Oftalmología (Arvo), para que estos determinaran si el estudio era aceptado o no.
Presentación
Meses después de enviar la investigación a la Arvo, la asociación la contactó para participar en la conferencia que celebran cada año, a la cual asisten alrededor de 10 mil oftalmólogos.
Cuando la llamaron, lo que más le sorprendió fue que le pidieron que hiciera una presentación oral de 15 minutos de su trabajo ante una asamblea en una sesión que se especializa en glaucoma, oportunidad que le dan a muy pocos, pues por lo general solo se presenta un poster con la información escrita de cada trabajo.
Utilización
Pese a que la investigación busca demostrar que se pueden presentar cambios estructurales con la técnica OCTA en la enfermedad del glaucoma antes de que los métodos que se utilizan ahora lo descubran, todavía faltan algunos cinco o 10 años para que esa maquinaria se empiece a utilizar. Al menos así lo concibe la joven galena.
Esto se debe a que por el hecho de ser una tecnología que surgió hace poco, todavía se está estudiando todo lo que pasa al usarla y hay que probar si efectivamente la detección temprana ocurre en todos los pacientes o solo en algunos.
Sin embargo, Castaños piensa que lo más importante es que con la investigación presentada se abrió una brecha para que otras personas sigan averiguando más a fondo sobre el tema.
Incentivar a los jóvenes
Si algo tiene claro María Virginia es que el mercado laboral es muy competitivo. Esa fue una de las razones por las que quiso indagar más sobre la especialidad a la que quiere dedicarse.
Según expresa, aunque en un principio no le gustaba mucho realizar trabajos de investigación, a medida que fue pasando el tiempo se dio cuenta de que estos ayudan mucho a crecer como profesional y a tener un pensamiento crítico.
Por eso considera importante que en el país se les motive a los jóvenes a realizar este tipo de trabajos. “Hay que estar conscientes de que hay muchísimas cosas que desconocemos pero que pueden ser investigadas”, concluye.