América Latina necesita un plan común frente a la pandemia, según expertos
América Latina se enfrenta al coronavirus con la ventaja de poder adelantarse a su expansión, pero con grandes carencias como el de la falta de integración regional, clave en estos momentos para afrontar desafíos como la fragilidad institucional o la informalidad laboral, con consecuencias directas para la economía y los derechos y libertades de sus ciudadanos.
Así lo expusieron este jueves cuatro expertos en la región en un debate virtual organizado por el Real Instituto Elcano, en el que realizaron un balance político, económico y social provisional de las consecuencias del Covid-19 en Latinoamérica.
En un mes, del 14 de marzo al 14 de abril de 2020 y como consecuencia del COVID-19, los países de América Latina y el Caribe pasaron de tener 2.999 contagiados (oficialmente reconocidos) y 55 muertos a 70.600 contagiados y 3.039 muertos, y aunque el pico de la pandemia aún no ha llegado, se espera para mayo.
LA INTEGRACIÓN REGIONAL, CLAVE
Y en ese contexto, se hace muy necesaria la integración regional dijo la excanciller argentina Susana Malcorra, una de las participantes en el debate.
La pandemia está profundizando en la falta de integración de la región “una carencia que siempre ha tenido” y que ahora se hace más que nunca necesaria, porque “no hay un sálvense solos, sino un sálvense de manera compartida”, señaló.
Malcorra recordó que desde el inicio de la pandemia no se han celebrado mesas de diálogo, ni de intercambio de información y experiencias, algo que remarcó también Carlos Malamud, investigador del Real Instituto Elcano, quien aseguró que antes del Covid-19, Latinoamérica era una región “fragmentada, heterogénea e incierta y ahora lo es mucho más”.
El control de las fronteras es un ejemplo de esa necesidad de alcanzar soluciones en conjunto, según los expertos, que destacaron la situación de Brasil, sin bloqueo fronterizo y sin medidas de control de la pandemia, que se ha convertido en un flujo infeccioso para los países limítrofes.
Jorge Sicilia, economista jefe del BBVA, alertó del potencial de la enfermedad de generar un impacto económico severo en la región, que será “distinto al choque de 2008, porque ahora la capacidad económica latinoamericana es más débil que entonces”.
El impacto macroeconómico, a corto plazo, recaerá sobre una menor demanda de las exportaciones, la caída del turismo -principalmente en los países del área del Caribe-, la interrupción de las cadenas de valor, la caída del precio de las materias primas y de las remesas, que constituyen una parte muy importante del PIB de muchos países.
“Y a todo esto hay que sumar la poca entrada de capitales”, planteó nSicilia.
MIEDO A LA PÉRDIDA DE LIBERTADES Y DERECHOS
“Cuando surgen los miedos hay una tensión muy clara entre las libertades y el autoritarismo, y creo que hay rasgos de autoritarismos en algunos lugares de la región”, alertó Malcorna, quien cree que la tentación de “algunos gobiernos” de inclinarse por medidas que recorten los derechos y libertades de los ciudadanos es “una complejidad adicional a la que tienen otros países” frente al coronavirus.
Por eso, reforzar las instituciones y los gobiernos de los países latinoamericanos para evitar “hiperliderazgos” es fundamental para Cristina Gallach, secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe del Gobierno de España.
Gallach señaló la salud pública, la economía informal, que afecta al 40% de la población latinoamericana, y la brecha digital, como las áreas fundamentales donde concretar la acción en la región y destacó que las tres tienen “un clarísimo eje de género”, ya que las mujeres son “las más afectadas”.