Aumentan infecciones y muertes por COVID-19 en todo el mundo
Los hospitales de Turquía y Polonia se están llenando. Pakistán está restringiendo los viajes internos. El gobierno de Estados Unidos le enviará más ayuda a Michigan, el estado con el mayor incremento de contagios de coronavirus en el país.
El aumento mundial de los casos y muertes por COVID-19 incluye a Tailandia, que ha soportado la pandemia mucho mejor que otras naciones, pero ahora pasa apuros para contenerla.
Las únicas excepciones a la situación son países con programas de vacunación avanzados, básicamente Israel y Gran Bretaña. Estados Unidos también está registrando un aumento de nuevos casos a pesar de que es un líder global en vacunación, y la Casa Blanca dijo el viernes que enviaría asistencia federal a Michigan para controlar la tasa de infecciones del estado, la peor del país.
La Organización Mundial de la Salud indicó que los contagios están aumentando en todas las regiones del planeta, impulsados por las nuevas variantes del virus y porque en muchos países la población dejó el confinamiento demasiado pronto.
“Hemos visto aumentos (de casos) en todo el mundo durante seis semanas. Y ahora, tristemente, estamos viendo incrementos de las muertes en las últimas tres semanas”, dijo la doctora Margaret Harris, vocera de la OMS, en un encuentro con la prensa en Ginebra.
En su actualización epidemiológica semanal, el organismo indicó que en la última semana se reportaron más de 4 millones de casos de COVID-19. Las muertes aumentaron 11% en comparación con la semana previa, con más de 71.000 reportadas.
El incremento de las infecciones, hospitalizaciones y fallecimientos se extiende a países en los que la vacunación finalmente está cobrando impulso. Eso hace que las perspectivas sean aún peores para gran parte del mundo, donde los programas de inoculación a gran escala siguen siendo una realidad distante.
Uno de los países más afectados es Turquía, donde la mayoría de los casos nuevos de coronavirus están relacionados con una variante detectada por primera vez en Gran Bretaña.
Ismail Cinel, director de la Asociación Turca de Terapia Intensiva, dijo que el incremento de casos está empezando a generar presión sobre el sistema de salud relativamente avanzado del país, y “las alarmas están sonando” para las unidades de cuidados intensivos, las cuales aún no están saturadas.
“La forma mutante del virus está provocando más daño a los órganos”, señaló Cinel. “Antes morían 2 de cada 10 pacientes; ahora la cifra es de 4 de cada 10. Y si seguimos así, perderemos a 6″.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan disminuyó las restricciones por el COVID-19 en marzo para reducir el daño a la economía del país. Pero el nuevo repunte lo obligó a anunciar nuevas restricciones, tales como confinamientos los fines de semana y el cierre de cafés y restaurantes durante el Ramadán, el mes sagrado musulmán, que comienza el 13 de abril.
En la capital estadounidense, el gobierno del presidente Joe Biden esbozó cómo el gobierno federal planea ayudar a Michigan a administrar mejor las vacunas que ya han sido asignadas al estado, así como ampliar la capacidad de pruebas diagnósticas y la disponibilidad de fármacos. El apoyo no incluirá más vacunas.
Por su parte, Brasil tiene el segundo mayor total de muertes en el mundo, sólo superado por Estados Unidos. En Sao Paulo han tenido que efectuar entierros nocturnos para poder lidiar con la demanda, y se han usado autobuses escolares para transportar féretros. El ritmo de vacunación avanza lentamente —menos de 3% de los 210 millones de brasileños han recibido las dos dosis, de acuerdo con el portal de investigaciones Our World in Data—, y algunos gobernadores estatales han expresado preocupación sobre los suministros.
Pakistán se encuentra en medio de una tercera ola de contagios, y sus gobernantes restringirán el transporte en las ciudades los fines de semana a partir del viernes a medianoche.
En Tailandia, las autoridades ordenaron nuevas restricciones para tratar de contener los contagios.
Polonia ha sufrido un incremento drástico de los fallecimientos, y los hospitales se han visto obligados a rechazar a pacientes con cáncer y otras enfermedades debido a que las unidades de terapia intensiva y otras áreas están llenas de enfermos de COVID-19. Las hospitalizaciones por coronavirus se han incrementado 20% en las últimas dos semanas.