Capilla de San Pablo: “La Iglesia Sobreviviente”
Ubicada en el 209 de Broadway en el Bajo Manhattan en Nueva York, se encuentra la capilla de San Pablo, la iglesia más antigua que sobrevive en esta ciudad. Se trata de un templo episcopal perteneciente a la Iglesia Trinity. La Capilla de San Pablo, data de 1766 y ha sido testigo de importantes acontecimientos que han marcado la historia del país. Es conservada bajo el registro de edificaciones históricas de los Estados Unidos.
St. Paul’s, como se conoce en inglés, es parte auxiliar de la Iglesia Trinity, localizada a unos cuantos bloques de distancia de esta. Fue construida en el estilo gregoriano clásico-renacentista por Andrew Gautier, quien adoptó el patrón arquitectónico de James Gibbs, diseñador de la iglesia británica St. Martin in the Fields, en Londres.
La iglesia es a menudo mencionada como “la que se mantuvo” ya que sobrevivió milagrosamente al “gran fuego” de 1776, que destruyó más de 500 estructuras en Manhattan. Resistió al siniestro gracias a una brigada de ciudadanos que se aprestaron a cargar agua en cubos y otros envases que encontraron a su paso, desde el cercano río Hudson, para evitar que el fuego le consumiera.
El segundo momento importante de su historia tiene lugar en 1789, cuando George Washington asiste a un servicio especial de inauguración de su presidencia, el 30 de abril y tras la destrucción de Trinity por el fuego, hace de St. Paul’s su iglesia madre.
En 2001, la capilla de San Pablo, vuelve a presenciar un episodio negativo de la historia americana, cuando el World Trade Center, ubicado justo en frente de la iglesia, colapsa tras los ataques terroristas del 11 de septiembre. Dada la cercanía de la capilla, con la zona del desastre, se temía que la antigua edificación resultara severamente afectada, sin embargo, aparte de los escombros que cubrieron completamente, el patio cementerio de la parte frontal de la iglesia, no hubo daños mayores.
A partir de entonces, la iglesia se convirtió en refugio y centro de operaciones para un ministerio especial que brindó asistencia médica, comida y apoyo a los más de 14,000 voluntarios que participaron en las labores de rescate y limpieza de la hoy llamada Zona Cero.
Actualmente, St. Paul’s es una de las principales atracciones turísticas del Bajo Manhattan, donde se ofrecen tours con demostraciones tanto del interior como del exterior de la capilla. Dentro del templo, en el pasillo norte se halla el banco que George Washington usaba hasta que la capital fue trasladada a Filadelfia; en el lado opuesto, está el banco del gobernador de Nueva York. Allí también se observan los vitrales de Pierre L’Enfant, el Gran Sello de los Estados Unidos, los candelabros de cristal originales desde la inauguración y el cajón auténtico del órgano que fue traído desde Inglaterra en 1802 y que hoy contiene el órgano que le reemplazó en 1870.
En el patio cementerio, se hallan las tumbas de importantes personalidades de la historia americana como John Bailey, Major John Lucas, Major Job Summer, George Frederick Cooke; algunos de los combatientes de la era revolucionaria, cuyas lápidas están ilegibles pero se identifican por la estrella veterana. En esta área también se encuentran varios monumentos, incluyendo las campanas Thomas Mears of London de 1797 y la conmemorativa de los 100 años de la iglesia, a estas se añade la Campana de la Esperanza, obsequiada en septiembre de 2002 por el alcalde de la ciudad de Londres.
La capilla de San Pablo, es un importante y solemne monumento religioso cuya relevancia no se limita únicamente a su valor eclesiástico sino al papel que ha jugado en la historia del estado de Nueva York y el país. Es una parada de interés para turistas y locales, que habla de la estabilidad de los neoyorquinos que se mantienen inamovibles a pesar de las circunstancias.