Científico dominicano investiga nuevas formas de producir combustibles
Una investigación busca desarrollar nuevas tecnologías para la producción renovable de combustibles y un químico dominicano de 27 años está a cargo del proyecto. Carlos Read es otro de los noveles investigadores científicos que está dando pasos apreciables en su desarrollo como profesional.
Él, al igual que Stephany Pérez Monsanto, estudió el grado universitario en la Utah State University (Universidad Estatal de Utah), en Estados Unidos mediante una beca internacional otorgada por el Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (MESCYT) a través del FONDOCYT (Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico).
Es egresado de licenciaturas en Química y Física. Luego obtuvo un Doctorado en Química de Penn State University (Universidad Estatal de Pensilvania) bajo la supervisión del profesor Ray Schaak.
Actualmente se desarrolla en el área científica como Postdoctoral Fellow (Investigador Postdoctoral) en el California Institute of Technology, también conocido como Caltech.
Dos científicos son para él ejemplos a seguir: Tom Jaramillo y Matt Kanan, ambos son profesores en la Universidad de Stanford, California. Sus investigaciones están enfocadas en las áreas de catálisis y electrocatálisis.
Investigación en marcha
Carlos Read vive la ciencia en su trabajo académico y profesional. Pero con mayor intensidad disfruta de la labor diaria que realiza con la finalidad de dejar frutos en el futuro. Read realiza una investigación que busca desarrollar nuevas tecnologías para la producción renovable de combustibles.
Específicamente, “se enfoca en la síntesis y caracterización de materiales inorgánicos nanoestructurados que utilizan la luz solar para producir combustibles y químicos a través de procesos similares a los encontrados en sistemas fotosintéticos naturales, es decir, a través de la luz solar, agua y dióxido de carbono”, explica el joven químico.
Puntualiza, además, que “uno de los objetivos principales de la investigación es desarrollar un sistema integrado a base de componentes abundantes que permita la producción de combustibles líquidos de una manera eficiente y competitiva en términos de costo comparados con las tecnologías actuales, utilizando solo luz, agua y dióxido de carbono como materias primas”.
Desarrollo en el exterior
La carrera profesional de Carlos Read lleva un impulso sin interrupciones en Estados Unidos. En un futuro se visualiza continuando como investigador en un ambiente académico o industrial.
Él, junto a otros científicos dominicanos que han estudiado y ejercen en otros países, tiene el deseo de aportar sus conocimientos y experiencias a la solución de los problemas nacionales. Sin embargo, Carlos Read señala que República Dominicana carece de recursos financieros para la investigación: “Las condiciones de los laboratorios y la falta de una comunidad científica dominicana lo dificultan, al igual que la ausencia de una agenda científica y políticas públicas que se orienten a este sector dedicado a la investigación”.
El joven buscaba más de lo ofertado. Expresó que algunas universidades del país incluyendo la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) ofrecen licenciaturas en varias ciencias básicas como Física, Química y Biología. De hecho, estudió brevemente en la UASD antes de transferirse a Estados Unidos. “Decidí continuar mis estudios en el exterior por las mismas condiciones que mencioné anteriormente y por las oportunidades que esto presentaba”.
Estructura de la ciencia
Sobre el fomento, desarrollo e interés en la ciencia, ¿Tiene República Dominicana los recursos y la estructura de desarrollo para la ciencia? ¿Hay oportunidades, puestos laborales y remuneración adecuada para los científicos? El investigador químico responde: “Actualmente nuestro país no cuenta con las posiciones, recursos, ni estructuras necesarias para el desarrollo de la ciencia.
Es necesario la creación de un instituto nacional de investigación en ciencias básicas con los estándares internacionales, para lo cual se requiere una significativa inversión del Estado y si es posible del sector privado, así como diligenciar aportes de organismos y fundaciones internacionales y establecer una política y programa de relaciones científicas con instituciones similares de Estados Unidos, Europa y Asia. Simultáneamente, es necesario desarrollar en nuestras escuelas y universidades, una cultura científica y un programa de enseñanza de las ciencias que esté lo más vinculado posible a la práctica”.
Lo que les recomienda a los jóvenes
Las facilidades tecnológicas de los últimos años permiten tener una serie de recursos al alcance de la mano. Desde pequeños se puede contribuir a ese interés, así lo afirma Carlos Read.
El químico dominicano sugiere, entonces: “Les recomendaría que estudien mucho y que vayan determinando qué área de las ciencias les llama más la atención. También creo que es muy útil conversar con profesionales del área que hayan seguido trayectorias similares a las que les interesan. Hoy en día a través de la Internet y las redes sociales es fácil contactar directamente a estos expertos que de manera constante están dispuestos a compartir sus experiencias con los jóvenes”.
FICHA PERSONAL
Nombre: Carlos Read.
Lugar de nacimiento: Santo Domingo.
Nacionalidad: Dominicana.
Edad: 27 años.
Estudios: Licenciado en Química y Física con Doctorado en Química en la Universidad Estatal de Pensilvania. Realiza un Postdoctoral en el Caltech.
Investiga: El desarrollo de nuevas tecnologías para la producción renovable de combustible a través del uso de la luz solar, agua y dióxido de carbono como materias primas.
Científico que admira: Tom Jaramillo y Matt Kanan, ambos profesores en la Universidad de Stanford.
INTERÉS POR LA CIENCIA
De niño, Carlos Read tuvo curiosidad e interés por la ciencia y los estudios, pero afirma que su padre y su abuelo también jugaron un gran papel importante en la identificación y desarrollo de la misma. Cursó sus primeros estudios en el colegio La Salle de Santo Domingo.
Los padres y la familia en general influyen en el éxito o el fracaso de los hijos. Así lo considera este científico, quien manifiesta que “el entorno familiar y el medio social donde uno se desenvuelve influyen mucho en lo que seremos en el futuro”.
Sobre sus padres, resalta: “Tuve la dicha de recibir muchos estímulos positivos, apoyo y comprensión de mi familia en el desarrollo de mis intereses”.