Cómo actuar si se moja tu ordenador o teléfono móvil
Ya sea el teléfono móvil o el ordenador, antes de acudir al técnico hay determinados trucos que puedes llevar a cabo en casa para evitar que se dañen sus piezas interiores.
Una de las grandes apuestas de las empresas de tecnología es crear dispositivos electrónicos resistentes al agua.
Si bien ya se han distribuido varios con esta característica, la mayoría continúa siendo muy sensible al contacto con cualquier medio acuático.
Por esto, el que un teléfono móvil u ordenador se moje por cualquier razón representa un gran problema para los usuarios, especialmente si se desconoce cómo actuar de forma correcta.
Casi siempre los aparatos se terminan dañando por completo porque no se les brinda el trato adecuado para retirarles el líquido.
Por ejemplo, una de las primeras reacciones es tocar las teclas o apretar el botón de encendido para saber si aún funcionan.
¡Grave error! En ocasiones el dispositivo no se ha dañado, pero tras realizar este tipo de acciones se producen cortocircuitos que resultan fatales.
Como muchos no saben qué es lo que se debe hacer ante estos casos, a continuación vamos a compartir algunos consejos prácticos.
Eso sí, estos no garantizan que el dispositivo vaya a funcionar o quede en perfecto estado. En ocasiones la humedad afecta partes difíciles de alcanzar, las cuales pasan factura más adelante.
No encender el dispositivo
Si el dispositivo se mojó estando encendido, apágalo de inmediato y no intentes apretar ninguna de sus teclas.
Si por suerte estaba apagado, no trates de comprobar si aún funciona. Retírale todos los elementos que puedan removerse y trata de extraer los excesos de agua.
Tratar de manipularlo en estas condiciones lo único que causará es que se quemen componentes importantes por los cortocircuitos.
En lo posible debes dejarlo quieto uno o dos días antes de intentar encenderlo de nuevo.
Retira la batería
Aunque esta medida va muy ligada al punto anterior, es importante hacerle una mención especial, porque de la batería depende el funcionamiento del dispositivo.
Tras tener un accidente con agua, quita de inmediato este componente, así como la tarjeta SIM y la memoria.
Si haces esto a tiempo podrás salvar el dispositivo, ya que ningún circuito podrá activarse sin este elemento dentro del móvil.
Sécalo
Continuando con las medidas que se deberían tomar por sentido común, el siguiente paso será usar un paño suave para secar cada parte del aparato.
Seca bien la batería y después ponla en un lugar ventilado para asegurarte que no le quede ni un rastro de humedad.
Asimismo, absorbe el agua que queda en las pequeñas ranuras que se pueden alcanzar al quitar la batería.
¡Ojo! Evita el uso de secadores para el pelo, porque puede resultar peor. Lo mejor es dejarlo al sol sin intentar otra clase de métodos.
Intenta con el truco del arroz
El famoso truco del arroz continúa vigente como medida para absorber la humedad de los dispositivos electrónicos.
Introduce el móvil o la tableta en una cantidad abundante de arroz, y déjalo allí durante uno o dos días.
En este tiempo se retirará el agua que queda en esas partes internas que no alcanzas a limpiar con un paño.
Este truco no es tan recomendado para ordenadores porque, además de ser menos práctico, el arroz puede introducirse en las ranuras y empeorar el problema.
Utiliza bolitas de gel
Las bolitas de gel que contienen algunos de los objetos que compras en el mercado también pueden ser útiles para retirar los excesos de líquidos.
Estas están diseñadas con el mismo fin y son una alternativa para quienes prefieren no malgastar su arroz.
Usa un limpiador apropiado
Si la humedad que absorbió tu dispositivo es diferente al agua, por ejemplo de una bebida azucarada, estarás ante un problema más complejo.
El azúcar es pegajoso y más difícil de limpiar aunque se espere el tiempo prudente. Esta puede quedar en pequeñas partículas que al calentarse causan daños en los circuitos.
Cuando caen por ejemplo sobre el teclado, puedes utilizar el limpiador que venden en las tiendas con este fin.
Sin embargo, lo más conveniente es llevarlos al servicio técnico para que ellos puedan quitar todos los excesos de los componentes interiores.
Por otro lado, si el artefacto se mojó con agua salada las noticias no son nada alentadoras. La sal es mucho más dañina que el líquido y son muy pocas las probabilidades de que se salve.
Para estos casos el único intento será llevarlo al técnico para ver si cuenta con algún producto adecuado para su limpieza.
Siguiendo estos consejos y, sobre todo, teniendo mucha paciencia, tendrás más probabilidades de salvar o prolongar la vida útil de tu dispositivo.