Cómo limpiar tu hígado para perder peso
Mantener un hígado sano y libre de toxinas es, sin duda, un paso esencial para poder ir perdiendo peso poco a poco y de modo efectivo. Pero en ocasiones, el alimentarnos de modo incorrecto nos puede pasar una alta factura en nuestra salud. Te ofrecemos pues, sencillas pautas para depurar este órgano, cuidarte y perder peso.
Relación entre el hígado y la imposibilidad de perder peso
Seguro que te ha ocurrido en más de una ocasión. Nos esforzamos en seguir una dieta, hacemos ejercicio, pasamos incluso hambre y sin embargo, la báscula sigue sin indicarnos que estamos perdiendo kilos. ¿Por qué ocurre? ¿Por qué nuestra figura, nuestro organismo no elimina ni un solo gramo de grasa?
Muchos médicos y nutricionistas lo tienen claro: si no cuidamos el hígado adecuadamente, este se intoxica, se sobrecarga, se puede volver incluso demasiado graso. Todo ello deriva muchas veces en obesidad. Además, no podemos pasar por alto que si el hígado se sobrecarga nuestro sistema inmunológico empezará a debilitarse y sufriremos muchas más enfermedades. ¿Vale la pena? Desde luego que no.
A su vez, tampoco debemos olvidar que la obesidad ejerce a su vez una peligrosa espiral: la acumulación de grasa o el exceso de tejido adiposo en el cuerpo favorece muchas enfermedades hepáticas como el hígado graso, cardiovasculares y diabetes; pero a su vez, la presencia de lípidos y toxinas en el hígado nos hace más problemático el hecho de perder peso.
Cabe destacar, además, que el hígado es el órgano principal que quema grasa. Se necesita que tanto él como la vesícula biliar trabajen en equipo para procesar y depurar las grasas. Si ambos están llenos de toxinas nunca podrán ejecutar adecuadamente su trabajo. Así que vale la pena aplicar a nuestra cotidianidad los siguientes consejos para mantener sanos tanto el hígado como la vesícula y así, perder peso de modo más saludable.
Opciones para depurar tu hígado y perder peso
1. Los aguacates
Es muy beneficioso consumir medio aguacate al día o uno de tamaño mediano. Es una de esas frutas enormemente saludables capaces de depurar toxinas de nuestro organismo, aportarnos grasas beneficiosas y, además, limpiar nuestro organismo. Inclúyelo en tus ensaladas, en tus desayunos. Tomado de modo equilibrado nos puede permitir perder peso.
2. Los granos enteros
Consumir, por ejemplo, pan de grano entero, de trigo, de cebada, de avena, arroz integral…etc, es un gran acierto. Su secreto está en su riqueza en vitaminas del complejo B, que mejoran la metabolización de las grasas en general y la función hepática que nos permite fortalecer y y descongestionar el hígado. Te ayudarán a perder peso y además, cuidarán de tu salud.
3. Los beneficios del té verde
Ya conoces muchos de los beneficios del té verde. Es esa bebida rica en antioxidantes que nos ayuda a depurar, que acelera el metabolismo, que, gracias a sus catequinas, mejora el funcionamiento del hígado. Vale la pena tomarlo en nuestro desayuno o bien a media tarde. El té verde nunca falla, es ese remedio delicioso y adecuado que te ayudará.
4. Las saludables uvas
Uvas blancas, uvas moradas… no importa. Son un tesoro natural de antioxidantes que activan la producción de bilis y la función que desintoxica el hígado. Disponen además de propiedades antienvejecimiento y protectoras de nuestro corazón, gracias a su alto contenido en un potente antioxidante, el resveratrol. Es una de esas frutas más adecuadas para nuestra salud. No lo dudes.
5. Una manzana verde al día
Te lo hemos comentado en más de una ocasión, las manzanas verdes,como la Grany Smith, son esas piezas indispensables con las que empezar bien el día. Contienen pectina y componentes químicos que nos ayudan a que el cuerpo elimine las toxinas del tracto digestivo. Todo ello facilita el trabajo del hígado y, en consecuencia, nos permite perder peso.
6. Jugo de betabel y zanahoria
También lo conoces. Este jugo natural, además de sabroso, es realmente saludable. Nos permite perder peso, nos ayuda a depurar y, además, es muy rico en flavonoides y beta-caroteno. Ambos ayudan a estimular y mejorar la función hepática. Un remedio natural que muchas personas ponen en práctica al menos 3 veces a la semana. ¿Eres tú también una de ellas?
7. Las verduras de hoja verde
Espinacas, berros, coles de bruselas, rúcula, escarola… son ideales para limpiar el hígado. Además, su contenido en clorofila nos permite absorber las toxinas del torrente sanguíneo e ir limpiando de modo muy efectivo el organismo, ayudando en sus funciones a nuestro hígado.
8. La cura del aceite de oliva con limón
Te hemos hablado en alguna ocasión de esta sencilla cura para tus mañanas. Basta con una cucharada de aceite de oliva virgen extra y tres gotitas de jugo de limón. De este modo depuramos toxinas de nuestro organismo, se limpia el intestino, el colon, actúa como un buen tónico, un gran digestivo y además, te aportará ácidos grasos adecuados y numerosas vitaminas. Algo tan sencillo y económico hará por ti mucho más que un medicamento. Cuida de tu hígado y te permite perder peso. ¡Pruébalo!