A muchas madres les invade la sensación de culpabilidad; ¿haré bien? ¿se quedará contento en la guardería? (siempre que seas de las afortunadas que encuentran una plaza) ¿estará bien cuidado con la canguro? En España, un porcentaje muy alto de niños se quedan al cargo de las abuelas y, de hecho, esta es la razón por la que el absentismo laboral de las madres es más bajo que en el resto de los países europeos. Pero aunque sepamos que están bien cuidados y atendidos, siempre existe la duda y el miedo de no dedicarle la suficiente atención.
Tarde o temprano necesitarás encontrar a alguien que se ocupe del niño, tanto si sientes la necesidad de volver al trabajo, como si tienes ganas de disfrutar de unas horas sin la compañía, que resulta muy tierna pero que conlleva muchas responsabilidades, del bebé, lo cual es totalmente legítimo por tu parte. Es obvio que hay que dejar al pequeño con una persona de confianza, sin sentirse culpable ni angustiarse inútilmente, y evitando pensar continuamente qué le puede suceder, o atormentarse con el hecho de que sólo tú lo conoces perfectamente y puedes entenderlo. Ciertamente, el sentimiento que existe entre tu hijo y tú no puede producirse con otra persona, pero tu hijo tiene que aprender a estar con otras personas de forma gradual y a transcurrir un tiempo sin ti, ya que de otra manera cada vez que se produzca una separación obligatoria (guardería, escuela, etc.) podría crearle un trauma y hacer de él un niño inseguro.
La responsabilidad de cuidar al pequeño cuando la madre no está puede recaer tanto en un familiar, un allegado o en un canguro. ¿A quién preferir? Sobre esta elección pueden influir varios factores, uno de los cuales es el económico, pero pudiendo elegir, se debe preferir a la persona en la que se tiene mayor confianza, que simpatice y que sintonice más con el niño. La elección de la abuela tiene la ventaja de que, al ser una persona de la familia, al pequeño le resulta más fácil separarse de su madre. Por el contrario, puede existir el riesgo de que la abuela interfiera demasiado en la relación madre-hijo, que tome demasiadas iniciativas o que no sea lo suficientemente enérgica para afrontar los juegos “encadenados” que el niño, a medida que crece, necesita y quiere llevar a cabo.
Es evidente, en cualquier caso, que el canguro ha de ser también de una confianza absoluta, para garantizar al bebé una presencia constante y regular y asegurarle una vida ordenada, con puntos de referencia bien definidos. Sea como sea, es fundamental que la jornada del niño se base en una cierta regularidad, por lo que lo ideal es que las personas que se ocupan de él sean siempre las mismas y establezcan con el niño una relación de continuidad.
Antes he hablado de confianza. ¿Nos fiamos lo suficiente de Internet? La verdad es que no nos es fácil dejar el cuidado de nuestros hijos a un desconocido, a alguien que hemos encontrado por internet. Nos fiamos más de la vecina, de la amiga que nos dice: “esta chica es una maravilla, a mi me funciona muy bien, es muy responsable, adora a los niños, etc”. Pero si nos paramos un momento a pensar; ¿no es lo mismo? ¡Al fin y al cabo es una desconocida para nosotros! Debemos creer en la posibilidad de encontrar a la persona que buscamos para el cuidado de nuestros hijos por éste medio que es Internet. Simplemente queremos algo serio, algún lugar que nos ofrezca garantías.
Existen muchas páginas de clasificados donde podemos encontrar a personas dispuestas a cuidar de nuestros hijos, pero ninguna de ellas es especializada en canguros.
Parece ser que la gente de www.canguroencasa.com piensa (probablemente de manera acertada) que puede ser de utilidad una página exclusiva de canguros. La idea es atractiva. Aquí sólo encontraremos personas dispuestas a cuidar de nuestros niños con perfiles de lo más variopinto (psicólogas, estudiantes, madres, etc.). La web es gratuita y permite buscar el perfil más adecuado para nuestras necesidades. También podemos exponer el perfil que buscamos y que quien cumpla nuestros requisitos podrá contactar con nosotros.
Para concluir decir que no será fácil eliminar el miedo que existe al dejar a nuestros hijos a cargo de otras personas, pero debemos tener en cuenta que existen perfiles con mucha preparación y experiencia y, ¿porqué no los vamos a encontrar en internet?
Jordi Martin Balot (jmartin@canguroencasa.com)