Consejos de nutrición para correr mejor
Antes, durante y después de entrenar
Es importante lograr un orden en las diarias, tratando de desayunar, almorzar, merendar y cenar todos los días a la misma hora.
Antes de entrenar: Se recomienda comer algo entre 2 y 4 horas antes de realizar actividad y elegir alimentos de alto contenido en hidratos de carbono (pan, , papas, pastas, cereales) y frutas. Podemos elegir infusiones calientes como sopas, café, mate con o sin leche. Si no tenemos mucho tiempo antes de salir a correr, lo idea es comer algo liviano como una fruta, una compota de frutas o tomar jugo de frutas.
Durante el entrenamiento: No es necesario comer algo sólido durante el entrenamiento. Se pueden mantener los niveles de glucosa en sangre a través del consumo de bebidas deportivas. Lo que sí es importante es hidratarse bien antes, durante y luego de la actividad. En invierno uno siente menos sed y las ganas de tomar bebidas disminuyen, pero el cuerpo igualmente pierde líquidos aunque no nos demos cuenta.
Después de entrenar: Se puede comer algún snack nutritivo, como barritas de cereal, sopas de verduras, frutas o un yogurt descremado. La comida principal post entrenamiento deberá ser rica en proteínas (carnes magras o huevos) y estar acompañada con cereales, vegetales, hortalizas o legumbres.
Carreras de invierno
Para la comida previa a la carrera, se puede optar por alimentos como el pan, los cereales, los lácteos descremados y las frutas enteras o en forma de jugos.
Durante la carrera es aconsejable consumir pequeñas cantidades de bebidas deportivas o agua (200ml cada 25 minutos). En las carreras de larga distancia se recomienda consumir pequeñas cantidades de hidratos de carbono a medida que vamos recorriendo kilómetros, que pueden ser barritas energéticas, banana cortada en pedacitos, geles, geles sólidos, pastillas de glucosa.
Ideas para prevenir los resfríos
*Realizar varias ingestas livianas y poco abundantes durante los primeros días del resfrío. Optar por frutas, verduras y hortalizas cocidas al vapor.
* Beber mucha agua
* Comer carnes, pollos magros y pescados.
* Las frutas como la naranja. El kiwi, la mandarina o los vegetales como el morrón son alimentos fuente de vitamina C. Comerlos también ayuda a reforzar el sistema inmunológico y acorta el curso de la enfermedad.
Las vegetales, las hortalizas y las frutas tienen muchas vitaminas y minerales que son esenciales para reforzar el sistema inmunológico y ayudan a prevenir los resfríos o las gripes que aparecen en invierno.