El peligro de usar una aplicación para encontrar tu celular robado
¿Y si una aplicación te pone cara a cara con el criminal que te robó el celular?
Eso fue lo que le pasó el fin de semana a un joven canadiense, que logró ubicar su celular gracias a la app “Encuentra mi teléfono” pero murió a balazos en su intento por recuperarlo.
Jeremy Cook, de 18 años, lo había dejado accidentalmente en un taxi en Londres, Ontario.
Después, utilizando una app para ubicar celulares perdidos o robados, se dirigió acompañado de un familiar al lugar señalado por la aplicación.
Pero al confrontar a los presuntos ladrones fue abaleado y murió.
La policía recomienda valorar los riesgos
El policía de la fuerza local Ken Steeves urgió a cualquiera que busque un celular desaparecido a valorar cuidadosamente una potencial situación de peligro.
“No es la aplicación la que hace la situación peligrosa, sino los seres humanos, la gente con la que interactúas”, le dijo al canal local de noticias CTV.
“Así que nuestro consejo es que ante cualquier indicativo de violencia, o de potencial violencia, nos llames y nosotros acudiremos”, recomendó.
Por otro lado, algunas voces en Canadá dijeron que algunos jóvenes tienden a sobrevalorar sus celulares.
“Desafortunadamente los jóvenes parecen creer que sus teléfonos son increíblemente valiosos. No lo son.
Reemplazarlos cuesta unos cientos de dólares, ciertamente no valen una vida“, le comentó al canal de televisión el analista de tecnología Carmi Levy.
¿Celulares sobrevalorados?
El incidente en Canadá no es el primero ni será el último.
El robo de celulares es un crimen en auge en muchas ciudades y la industria ha luchado contra esta tendencia desarrollando una serie de aplicaciones para paliar el problema.
Entre las medidas está la posibilidad de borrado remoto y la opción de “matar” el celular, usando el conocido en inglés como “kill switch”, que hace que el celular no le sirva de nada al criminal que lo robó.
Pero si bien estas opciones evitan que los criminales puedan acceder a tu información privada,no te permiten recuperar el dispositivo.
En mayo del año pasado la estadounidense Sarah Maguire, una profesora de yoga de 26 años, sí logró recuperar el suyo rastreándolo, como el joven canadiense, a través de la aplicación “Encuentra mi teléfono”.
Pero Maguire tuvo más suerte: confrontó a la persona en la dirección señalada y recuperó no sólo su dispositivo sino también el de su compañera de piso, que también había sido sustraído a la vez.
“Cuando le conté a mi madre lo que había hecho pensó que me había vuelto loca”, le dijo Maguire al diario The New York Times.
Ella fue afortunada pero la proliferación de apps que hacen rastreo por GPS está exponiendo a un peligro desproporcionado a muchos usuarios desesperados por recuperar sus celulares.
En otros casos en Estados Unidos un hombre atacó a la persona equivocada pensando que era quien le había robado el teléfono. Otro se enzarzó en una pelea en la que tuvo que intervenir la policía.
“Esto es un nuevo fenómeno. Va más allá de simplemente correr detrás de la persona que te robó el celular“, le dijo al diario George Gascon, expolicía y procurador de San Francisco.
“Abre la posibilidad de que la gente se tome la justicia por su mano y pueden meterse en aguas muy profundas si van a un lugar al que no deberían“, advirtió.
Cortesía: BBC Mundo