El sexo casual puede provocar depresión
A la hora de mantener encuentros sexuales esporádicos sin matices sentimentales hay que tener muy claro lo que implica esta práctica. No siempre el sexo casual es satisfactorio.
El sexo se encuentra cada vez más desligado de lo sentimental. Ahora son muchas más las personas que mantienen la mente abierta ante posibles encuentros sexuales sin que haya emociones de por medio. Esto les hace sentirse libres y sin ataduras.
El gran problema surge cuando el sexo casual empieza a asociarse con la depresión. Una relación que ha empezado a estar cada vez más presente en las personas que mantienen este tipo de sexo de forma habitual.
El sexo casual provoca depresión
El resultado de un estudio realizado por el Journal of Sex Research determinó que los resultados del sexo casual no eran los esperados. Nadie se imaginaría que estaría vinculado a la depresión.
Tal vez creas que esto es algo que solamente le ocurre a las mujeres, pues casi todo el mundo las considera más sentimentales. Pero son los hombres los que sufren más las consecuencias del sexo casual.
El hecho de que esto sea así no tiene nada que ver con lo sentimental o emocional que podamos ser, sino con las prácticas que hagamos del sexo casual. Al parecer los hombres, en este estudio, lo llevaban a cabo de forma más habitual.
Pero la depresión no es el único síntoma que puede derivarse de esta práctica. El estudio descubrió que, independientemente del sexo, los entrevistados que habían mantenido sexo casual recientemente presentaban mayores niveles de ansiedad y de aislamiento social.
Por lo tanto, según este estudio, el sexo ocasional no generaba tanta satisfacción como sus practicantes pensaban. ¿Estarían haciendo algo mal? ¿Dónde se encontraba el fallo?
Cuando el sexo genera insatisfacción
El sexo casual busca diversión, satisfacción. Esas cosquillas, esos nervios que quieres sentir de nuevo porque hace tiempo que no los experimentas, vuelven ahora. Pero, ¿realmente te deja satisfecho?
No todo el mundo está preparado para el sexo casual, pues como vemos son muchas las personas que caen en depresión, ansiedad y otros estados que no son beneficiosos. Tal vez este tipo de sexo no esté hecho para ti.
Son muchas las personas que descubren la felicidad y la verdadera tranquilidad solamente cuando sienten amor y tienen a una pareja estable a su lado. Al escapar de todo esto, se sumergen en una vorágine de emociones que no entienden y con las que intentan lidiar sin éxito.
Si el sexo casual no te hace feliz no intentes de nuevo volver a practicarlo. Esto te llevará tan solo a la tristeza y la depresión. Dos emociones no buscadas, pero con las que continuamente te encuentras.
Sí es beneficioso probar alternativas en cuanto al sexo que te pueden funcionar o no. Pero, en este caso, si te provoca problemas, es mejor no seguir intentándolo.
El sexo casual no siempre es negativo
¿Es el sexo casual siempre negativo? Es cierto que el estudio que mencionábamos al principio decía que sí, que generaba depresión y que, curiosamente, esto sucedía más en los hombres que en las mujeres.
Pero el sexo casual también tiene su lado positivo siempre y cuando sea algo que vaya con tu forma de pensar y de ser. Este tipo de sexo puede tener entre sus beneficios los siguientes:
- Inhibe el estrés.
- Ayuda a mejorar nuestro humor.
- Provoca un mayor bienestar general.
- Aumenta la autoestima.
Estas son algunas de las ventajas que tiene el sexo ocasional, aunque como bien hemos dicho no todas las personas pueden experimentarlas. Para hacerlo hay que tener muy en cuenta que los sentimientos deben dejarse a un lado.
Asimismo, nada de ponerse intensos e ir con la mentalidad de que puede haber algo más. No, el sexo ocasional no encierra ningún compromiso en ningún aspecto. Es tan solo eso, mero sexo.
¿Has practicado alguna vez sexo ocasional? ¿Crees que nunca podrías sumergirte en él? Son muchas las personas que creen encontrar la libertad en este tipo de práctica, pero después se encuentran con un montón de emociones y sentimientos que les confunden.
Hay que tener muy claro lo que implica practicar sexo de forma esporádica y sin compromisos. No es nuestra pareja, no nos debe nada. Si mantienes este tipo de sexo con las expectativas erróneas, puedes caer en las garras de la depresión.