Elimina la grasa no deseada en la espalda con estos simples ejercicios
En la búsqueda por combatir la grasa localizada, casi siempre nos enfocamos en áreas como el abdomen, las piernas, los glúteos y los brazos, que suelen ser las partes de nuestro cuerpo donde más se nota la grasa. Sin embargo, un área que muchos ignoramos y que es difícil de trabajar es la espalda.
Justo en la parte inferior de nuestro sujetador podemos ver esa área de grasa que hace que nuestra espalda se vea abultada y con unas protuberancias realmente antiestéticas. Por suerte, al igual que las demás áreas de nuestro cuerpo, esta grasa puede ser eliminada para recuperar la belleza de la espalda y volver a lucir esos vestidos ajustados.
Si estás lista para empezar a combatir la grasa localizada en tu espalda, no te pierdas estos excelentes ejercicios para eliminarla.Recuerda que debes adoptarlos como una rutina diaria para obtener buenos resultados en poco tiempo.
Pectorales
Las flexiones son uno de los ejercicios más comunes y utilizados en cualquier tipo de rutina. Los pectorales son excelentes para tonificar los brazos, además de ayudar a eliminar la grasa dorsal. Lo más importante de todo es saber hacer los pectorales de forma correcta, es decir, manteniendo una línea recta desde la cabeza hasta los talones.
Tablón o plancha lateral
Extiende tu colchoneta para yoga en el suelo y luego apóyate sobre tu antebrazo izquierdo de modo que el codo quede justo debajo de hombro. Cuando ya estés bien acomodado, levanta las caderas del suelo, contrae los músculos abdominales y mantén tu cuerpo en línea recta. Trata de mantener esta posición de 30 a 45 segundos en cada lado y luego descansa.
Pelota de ejercicios
Colócate boca abajo sobre una pelota de ejercicios, de modo que el pecho quede justo en el centro de la pelota. Mantén los dedos de las manos apuntando hacia el suelo y los pies bien juntos. Deja que el brazo quede suelto delante y procura conservar el equilibrio. Ahora, levanta el brazo lentamente para crear una “Y” con el cuerpo y mantén esta posición durante 15 segundos. Haz 2 series de 12 repeticiones.
Mancuernas
Elige un lugar donde te puedas mover libremente y toma una mancuerna de 10 o 15 libras (de 4,5 a 7 kg, aprox.). Coloca los pies a la anchura de las caderas y luego dobla las rodillas haciendoestocadas. A continuación, dobla la parte superior del cuerpo ligeramente, paralelo con el suelo, y coloca la mancuerna al frente sosteniendo las caderas contra la pared para conservar el equilibrio. Levanta la mancuerna a la altura del hombro y haz de 10 a 15 repeticiones.
Levante lateral
Coloca los pies a la anchura de las caderas y toma una mancuerna con cada mano. Dobla la rodilla y baja la parte superior del cuerpo formando un ángulo de 45 grados. Mantén ambas mancuernas paralelas al suelo y elévalas a los lados. Mantén las pesas al nivel de los hombros y baja lentamente. Haz 2 series de 12 repeticiones.
Posición de perro mirando hacia abajo
Esta posición de yoga permite trabajar todo el cuerpo, especialmente los músculos dorsales y trapecios en la parte superior de la espalda. Para realizarlo, debes buscar un lugar que te brinde suficiente espacio. Arrodíllate en el suelo y apoya las manos, manteniéndolas planas contra el piso. Empuja la espalda sobre los talones, procurando que esta quede recta y los brazos queden alineados con el cuerpo. Si tienes suficiente flexibilidad, coloca los talones sobre el suelo y mantén esta posición de 15 a 30 segundos. Una buena opción es elevar la espalda a la vez que las manos, manteniendo la cabeza hacia arriba.
Ejercicio cardiovascular
Toda buena rutina de entrenamiento debe incluir ejercicio cardiovascular para complementar los de fuerza. Este tipo de ejercicios es súper quemagrasas, ya que ayuda a reducir la grasa corporal y combate también esa que se crea justo debajo del sostén.Estos ejercicios son muy fáciles de poner en práctica y solo necesitas 30 minutos diarios para notar los resultados. Puedes practicar caminata, trotar, correr, saltar la cuerda, usar una máquina elíptica, montar en bicicleta, hacer natación o una buena sesión de aérobicos una vez a la semana. A medida que aumentes la intensidad de tus ejercicios, mejores resultados vas a conseguir, porque lograrás quemar más calorías.