Historias de amor: ‘La mujer muerta’ de Segovia
El amor está hoy de moda. Se celebra su Día. Y mientras unos manifiestan el sublime sentimiento con bombones, flores o champaña, en la ciudad de Segovia, España, sigue yacente ‘La mujer muerta’, la montaña, o mas bien la serie de montes, que según las leyendas conforman una o varias historias de amor, donde lamentablemente priman los celos. Celos de enamorados, celos de hermanos… Aquí les cuento algunas de las leyendas, que muy por encima mencioné en el artículo de viajes del miércoles pasado, y un lector me lo echó en falta. Es que preferí dejarlo para hoy 14 de febrero, día de San Valentín, Día del Amor y la Amistad, aunque bien pudiera haberla dejado para el día de las Madres.
El amor de madre impide una guerra
De varias leyendas que sobre ‘La mujer muerta’ se cuentan en Segovia, una de ellas relata la entrega de una madre que, por amor a sus dos sus hijos gemelos que se enfrentaban por el poder entre sí, ofreció a los dioses su vida. En la web de ‘segoguiados’ lo explican: al fallecer el jefe de una tribu sus dos hijos gemelos, que hasta entonces se habían llevado bien, decidieron enfrentarse para ocupar su lugar. La noche antes de la lucha la madre, que amaba por igual a sus dos hijos, para evitar perder a uno de ellos ofreció su vida a los dioses que aceptaron el sacrificio. Al momento se desató una tormenta que duró toda la noche. A la salida del sol, disipado el mal tiempo y cuando los ejércitos se disponían a la pelea descubrieron que en el centro del campo de batalla había aparecido una montaña, con forma de mujer dormida. Los hermanos, dándose cuenta que era su madre, decidieron gobernar juntos. ‘En los días claros a veces se ven dos nubes cerca de la cabeza de la mujer muerta, dicen que son los espíritus de los dos hermanos que se acercan a besar las mejillas de su madre’.
Los celos del amor
Otra de las varias leyendas atribuye la forma de ‘La mujer muerta’ a una joven de la cual estaban enamorados dos caballeros que un día decidieron batirse a espadas por ella. Con la intención de evitar el duelo la mujer se interpuso entre ambos, con tan mala suerte que fue alcanzada por las armas y falleció. En ese instante se desencadenó una tormenta y, tras finalizar, los combatientes vieron que las montañas, según relato de la web ‘condadodecastilla’ habían tomado las formas de la joven.
Y en el día de hoy…
¿Qué te parece celebrar el amor preparando una tabla con charcutería, frutos secos, quesos y chocolate? Mariella Stock te da los detalles en la revista Aldaba.