¿Problemas de conducta en los niños? Tal vez necesiten dormir más
Una investigación realizada en el Reino Unido encontró que un horario constante para irse a la cama a dormir contribuye a que los niños se comporten mejor. Aquí te cuento más sobre este hallazgo tan interesante que puede ayudarte si tu hijo(a) está teniendo problemas de mala conducta.
Crear rutinas para que los niños se vayan a la cama siempre a la misma hora es una parte importante de la vida en familia. No sólo porque les proporciona a los niños el tiempo de descanso que necesitan para estar sanos, sino porque les permite a los padres tener tiempo para compartir juntos y a su vez, descansar el tiempo que ellos requieren.
Pero más allá de un buen sueño y descanso, el horario fijo para irse a la cama podría además, contribuir a un mejor comportamiento de los niños. Un estudio realizado en el Reino Unido encontró que irse a la cama a horas irregulares está vinculado con la mala conducta de los pequeños.
Los investigadores del Colegio Universitario de Londres analizaron los datos de 10,000 niños de 7 años inscritos en un el Estudio de la Cohorte del Milenio del Reino Unido, cuando tenían 3,5 y 7 años. Además de recolectar datos sobre los horarios de sueño, se implementó una encuesta de 25 preguntas acerca de la conducta.
Se encontró que aquellos niños con horarios inconsistentes para irse a dormir tenían más problemas de conducta que los niños de su misma edad que se iban a la cama a una hora fija. Las madres y los maestros respondieron a las preguntas.
Si tu hijo(a) tiene problemas de conducta y también se va a la cama a horas diferentes todos los días, no te desanimes. Según los expertos, si cambias su rutina y haces que vuelva a dormirse a la misma hora cada noche, es muy probable que su conducta mejore. De igual forma, ocurre lo contrario, es decir que si tu hijo(a) se acuesta a la misma hora siempre y de repente se empieza a dormir a horas diferentes, puede que su conducta empeore.
¿Cómo influyen los horarios irregulares en la conducta? Según los autores del estudio, lo hacen de varias formas ya que interfieren con el buen funcionamiento de el ritmo circadiano (el reloj del cuerpo que determina los periodos de sueño y de vigilia) lo cual produce un estado similar al desfase de horario conocido en inglés como jet lag. Este desfase es un desequilibrio producido en el reloj interno de las personas y el nuevo horario que se establece al viajar distancias largas en avión a través de diferentes regiones horarias o husos horarios. La irritabilidad y la apatía pueden resultar de este desfase.
Los expertos también afirman que los cambios en los horarios del sueño interfieren con los procesos que contribuyen a la maduración del cerebro.
Por eso se recomienda, en lo posible, que establezcas rutinas para que tus hijos se vayan a la cama a la misma hora. Esto garantizará que descansen las horas necesarias para que estén más alerta, sean más receptivos y no tengan muchos cambios de humor.