¿Somos naturalmente infieles?
Según recientes investigaciones, pareciera que en nuestros antepasados cazadores nómades, el sexo, al igual que la comida, era un recurso compartido. Se vivía en grupos y los miembros adultos podían tener relaciones sexuales sin que mediara la exclusividad. Un especialista habló con Infobae sobre los mitos más populares sobre la monogamia.
Mucho se ha hablado acerca de la monogamia como imposición cultural, que se opone a la naturaleza del ser humano. Sin embargo, en pleno siglo XXI la gente se sigue casando y jurando amor eterno.
Voces a favor y en contra de la fidelidad son lo que sobran, pero, al parecer, hay razones culturales, históricas y por qué no antropológicas que nos hacen, naturalmente, infieles.
No obstante, “la gran mayoría de las personas practicaron y practican la monogamia”, en palabras del doctor Andrés Flichman, médico psiquiatra (MN 62595).
El debate está planteado. No es válido valerse de estos conceptos para justificar infidelidades. Aunque los años de historia parecen estar del lado de los/las “piratas”…
Infobae entrevistó al doctor Flichman para conocer cuánto de cierto hay en eso de “para toda la vida”.
¿Cuáles son los mitos más populares sobre la monogamia?
Los mitos en la pareja relacionados con la monogamia son innumerables y fuentes de gran sufrimiento en el vínculo amoroso pudiendo provocar la separación de una pareja y situaciones de violencia que incluyen el femicidio. Algunos de los mitos más populares son:
“El amor romántico sólo puede sentirse por una persona al mismo tiempo”.
“El amor pasional de los primeros meses puede (y debe) perdurar por siempre”.
“Todos los deseos pasionales (románticos y eróticos) deben satisfacerse con una única persona”.
“Nuestros sentimientos amorosos son tan íntimos que no están influidos por factores sociales, culturales o biológicos ajenos a nuestra voluntad”.
¿Cree entonces que la monogamia es un valor imposible de mantener en el tiempo?
Si bien sentir deseo hacia múltiples parejas es lo natural, esto no significa que la monogamia no sea posible, siempre que comprendamos que es un desafío difícil de sobrellevar. La antropóloga Margaret Mead sugirió en una ocasión que “la monogamia es la más dura de todas las disposiciones maritales humanas”.
¿Cómo eran las relaciones de pareja de nuestros antepasados? ¿Cuándo y por qué se comenzó a hablar de “exclusividad” en la pareja?
Pareciera, según recientes investigaciones, que con el advenimiento de la agricultura hace tan sólo 10 mil años, la propiedad se convirtió en un bien exclusivo. La única forma en la que un hombre podía asegurar su paternidad y por lo tanto la herencia de sus posesiones era mediante un estricto control del comportamiento sexual de su esposa (o esposas). El paso de las sociedades nómades a la sociedad agrícola dio lugar a la instalación de la relación monogámica como núcleo social, y como forma de asegurarse la herencia de la misma sangre.
Para nuestros antepasados cazadores nómades, el sexo, al igual que la comida, era un recurso compartido. Se vivía en grupos y los miembros adultos podían tener relaciones sexuales sin que mediara la exclusividad.
¿Qué es eso que usted denominada “monogamia secuencial o serial”?
Se trata de relaciones monógamas por espacios de tiempo acotados, en donde las personas van formando distintas parejas a lo largo de la vida. Se trata de una forma frecuente de relación de pareja que tiende a revertir la idea de relación con la misma persona a lo largo de la vida
Según su postura, ¿la infidelidad es una tendencia natural?
La tendencia biológica en el reino animal y la del ser humano está claramente orientada hacia la poligamia. Al mismo tiempo esto no significa que el adulterio deba ser una conducta inevitable. La gran mayoría de las personas practicaron y practican la monogamia, al menos la monogamia social.
¿A qué se refiere con “poliamor”?
El poliamor propone un modo diferente de entender la fidelidad y se define como la práctica de amar a más de una persona al mismo tiempo, lo que no implica necesariamente intimidad sexual.
Aun con la prevalencia de la monogamia, hoy en día también existen movimientos que proponen un modo diferente de entender la fidelidad, que separa la monogamia social de la monogamia sexual.
¿Cuál, a su entender, sería el “modelo” ideal de relación de pareja?
No creo que exista “el” modelo ideal, en todo caso, la relación que se construye en un marco de confianza mutua en la que el bienestar de cada uno de los integrantes de la pareja sea el bienestar del otro, eso se acerca a mi entender a una buena relación de pareja.
Un encuentro para debatir sobre un tema polémico
Esta tarde, de 18:30 a 19:45 se brindará la charla gratuita sobre “Monogamia: Mitos y Aspectos Socioculturales”, a cargo del doctor Andrés Flichman, médico psiquiatra y sexólogo clínico, miembro de la comisión directiva de la Asociación Argentina de Trastornos de Ansiedad.
La jornada se realizará en la Sociedad Científica Argentina, Avenida Santa Fe 1145, en el marco del ciclo de conferencias abierto a la comunidad “Desafíos de la Salud Mental en el Nuevo Milenio”.
El evento es organizado por la Asociación de Psiquiatras Argentinos (APSA) y la Asociación Psiquiátrica de América Latina (APAL), y cuenta con el auspicio del Laboratorio ELEA.
El encuentro busca reflexionar sobre las distintas creencias que existen acerca de la monogamia. Uno de los mitos al respecto es considerar que la monogamia es algo natural en el ser humano -en casi todos los mamíferos incluyendo a la mayoría de los primates no lo es- cuando en realidad se trata de una construcción sociocultural.