Joaquín Andújar dijo una vez: La pelota dominicana fuera mejor si los peloteros no fueran tan ñoños (VER VIDEOS)
SANTO DOMINGO. Joaquín Sabino Andújar, 62 años, murió este martes a causa de la diabetes. Con su partida se va uno de los mejores lanzadores dominicanos y de los jugadores criollos con mayor soltura, quizá demasiada, para decir lo que pensaba.
Siendo un estelar del pitcheo Andújar llegó a señalar a los peloteros dominicanos por “ñoños”, porque no jugaban con entrega el béisbol invernal dominicano. “La pelota invernal dominicana ahora mismo tiene mucho talento, muchos prospectos y puede ser muy buena pelota si los peloteros no fueran tan ñoños, si no fueran tan ñoños fuera el mejor pelotero del mundo”, declaró a la reconocida periodista Milagros García, a través del extinto programa Estrellas del Deporte.
A García también le aseguró que su retiro a destiempo llegó porque intereses de las Grandes Ligas lo querían a él y a Mario Soto fuera del béisbol. “A mí y a Mario Soto nos sacaron de Grandes Ligas porque Steve Stone aquel comentarista de los Chicago Cubs nos puso que éramos cazadores de cabeza, porque el béisbol ahora es para niños y para mujeres, no es para hombres macho. Hay dos diferencias, hay hombres machos y hombres y Mario Soto somos hombres machos y j siempre tirábamos pegado, adentro, pero no es cierto que tiráramos a la cabeza. Alguna bola se zafa. Entonces quisieron ponernos como ejemplo a mí y Mario Soto que somos uno de Baní y otro de San Pedro de Macorís”.
Pero además lamentó el hecho de que peloteros como José Rijo hicieran públicas las ocasiones cuando hacían un aporte a una causa. “Yo he hecho mucho bien, pero no lo pongo en la prensa. A José Rijo, que por favor, lo que él haga no lo ponga en los periódicos, no lo pongan en la televisión. Eso no hay que ponerlo en el periódico”, dijo en una de las entrevistas dadas a García.
Vida difícil
“Yo nací en una familia muy humilde. Yo no tuve niñez. Comencé la escuela tuve que dejarla porque mi familia no tenía cómo comprarme un par de tenis que en esa época costaba 1 peso con 50 centavos y mi familia no tenía eso”, contó en una de las entrevistas a García en la que destaca además que “yo tuve que trabajar a la caldera del ingenio Porvenir, con mi abuelo y me firmaron a los 15 años”.
Por esta razón aseguraba “me siento el hombre más agradecido de la tierra porque disfruto de cosas que no tenía antes, y no porque yo la tenga, si no porque mi familia y muchos amigos también la tienen”.
Sin embargo, las decepciones lo llevaron a no creer en las personas. “El pelotero no tiene mucho amigos, eso es embuste, el consejo que yo le doy es que no invierta tanto dinero como yo lo hice para ayudar a sus amigos. Yo invertí millones para ayudar a los amigos y lo que hicieron fue engañarme como hicieron unos camioneros”, expresó.