Kerr reconoce que todo salió a la “perfección” y por eso son campeones
Houston (EEUU), 19 de Junio (EFE).- El entrenador novato de los Warriors de Golden State, Steve Kerr, dos días después de haber ganado el título de campeón de la NBA, al superar 4-2 a los Cavaliers de Cleveland, en las Finales, reconoció que la gran sorpresa fue que todo salió a la perfección.
Kerr, que habló con los periodistas antes que hoy participe en el desfile popular por las calles de Oakland, acto, con el que podrán fin a una temporada de ensueño, que los dejó campeones de liga después de 40 años de espera, dijo que lo sucedido no era lo normal.
“Tengo que reconocer que ahora mismo para mi también es una sorpresa la manera como se dieron las cosas, que todo salió a la perfección, con una rapidez que nadie esperaba”, subrayó Kerr. “Sé como se dan los procesos ganadores, los he vivido de jugador y nada de lo que sucedió con los Warriors tiene antecedentes”.
Kerr ha recibido todo tipo de felicitaciones de excompañeros y entrenadores con los que se formó, incluidos los mensajes que le enviaron Phil Jackson, el mismo que lo quiso fichar para los Knicks de Nueva York, y Gregg Popovich, de los Spurs de San Antonio. Con ambos estuvo Kerr como jugador y logró cinco títulos de liga combinados, además de admitir que gracias a sus enseñanzas ahora ya ha conseguido otro, el primero, como entrenador. “Es irónico, pero lo inesperado fue que todo fue exactamente como esperábamos, pero mucho más rápido de lo que pensábamos que sucediese”, reiteró Kerr.
“Eso nunca se había dado en la NBA”. El último ejemplo fueron los Heat de Miami cuando lograron reunir al alero LeBron James y al pívot Chris Bosh con el escolta Dwyane Wade en los Heat de Miami, tres grandes estrellas de la NBA, y las primeras Finales de las cuatro que disputaron, las perdieron. De ahí, que admitiese que el mensaje que más le gustó y el que más reflejaba la realidad de lo sucedido fue el que le mando su excompañero de equipo Tim Duncan, la leyenda de los Spurs, que ironizaba con el texto de “es así de fácil, ¿eh?”.
La realidad es que los Warriors, que habían jugado muy bien en ataque durante la temporada regular, en la fase final se superaron en el apartado defensivo y ahí estuvo otra de las claves del triunfo ante unos Cavaliers, que al margen de las bajas nunca jugaron como equipo. Kerr también destacó que desde que llegó al cargó el objetivo era darle fuerza a la plantilla, que luego convirtieron en lema de los aficionados durante la fase final con el eslogan de “fuerza en números”.
El entrenador, ganador también del premio del Mejor del Año, los Warriors fueron el mejor equipo de la liga con 67 triunfos, dijo que el verdadero significado de la “fuerza” no era otro que darle profundidad al banquillo, que hubiese siempre jugadores competitivos en el campo. “Vamos a ser un equipo profundo.
Vamos a sacrificarnos todos”, destacó Kerr. “Los jugadores sabían que una noche saldrían al campo y otras no, y para eso tenía que haber un compromiso colectivo, que fue lo que pedí”. Kerr reiteró que a partir de ese momento fue cuando pudo trabajar a gusto, estar tranquilo porque los jugadores sabían que para él todos eran importantes, al margen que saliesen titulares o reservas, estuviesen más o menos minutos en el campo.
Eso fue precisamente lo que le permitió que el alero Harrison Barnes tuviese la oportunidad de crecer de demostrar el talento que poseía al sacarlo de titular en lugar del veterano y exjugador franquicia Andre Iguodala, al que le tuvo que decir que sería reserva y con la nueva misión de convertirse en el sexto hombre del equipo.
“Eso era lo que realmente necesitaba para ser un equipo campeón”, destacó Kerr, que dijo que creía en esa fórmula, pero todavía se sorprende de lo bien que funcionó. “Todo suena muy bien, pero honestamente que se haga realidad y que además veas como Iguodala es el ganador del premio de Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales es todavía más increíble, pero a la vez maravilloso y perfecto.
”, valoró Kerr. “De ahí, que siempre destacaré que la cosa más inesperada que he vivido en mi primer año como entrenador es que las cosas se desarrollaron a la perfección”. Kerr dijo que ahora ya estaba listo para el desfile ante los sufridos aficionados de los Warriors que por fin se sienten ganadores y saben que cuentan con un gran equipo, que en muchos apartados hizo también historia porque hizo posible que un ambicioso modelo y proyecto se viese culminado de inmediato.
Sobre sus futuros planes, dijo que descansar con la familia, pensar en el sorteo universitario y junto con el gerente general del equipo, Bo Mayers, otro de los grandes triunfadores de los Warriors, hacer que la próxima temporada sigan por el camino del progreso”.EFE