La Miel, un poderoso antibiótico natural
Ya desde la antigüedad, la miel ha sido conocida por su gran poder antiséptico y de conservación natural, manteniéndose comestible durante muchos años sin ningún conservante ni antioxidante añadido; un sabroso y completo alimento natural que sin embargo parece no gustar a las bacterias.
Y, ¿Por qué la miel cuenta con este poder microbicida capaz de matar a las bacterias?
Pues hasta ahora, se pensaba que este extraordinario poder antiséptico y bactericida de la miel se debía a su elevada concentración de azúcares, sin embargo, un reciente estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores de Ámsterdam, dirigido por Sebastian A.J. Zaat y publicado en la revista FASEB Journal muestra que la miel cuenta con ingredientes bactericidas naturales. En concreto, el estudio describe en su artículo que la miel acumula pequeñas partes de agua oxigenada y de metilglioxal, sustancias que poseen toxicidad sobre las bacterias. Además, en su composición, se pudo identificar un nuevo péptido, llamado defensina-1, con propiedades antimicrobianas.
Los péptidos antimicrobianos son pequeñas moléculas presentes en plantas y animales que actúan en mecanismos de defensa, eliminando a patógenos como bacterias, virus y parásitos, además de tener una función moduladora de la respuesta inmunitaria innata o natural.
El estudio demostró que la defensina-1 de la miel es capaz de matar Staphylococcus aureus resistente a meticilina, Escherichia coli resistente a beta-lactámicos, Pseudomonas aeruginosa resistente a ciprofloxacina y Enterococcus faecium resistente a vancomicina, entre otros.
Una sorprendente sustancia producida por las abejas para defenderse de microbios, transmitida a la miel de los panales y de ahí a nosotros, sus consumidores.