La mortalidad materna en RD es de 159 defunciones por cada 100 mil nacidos vivos.

República Dominicana está ubicada en el cuarto lugar de los países con la tasa de mortalidad materna más alta en las Américas, después de Haití, Guyana y Paraguay. Según cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y ofrecidas por el Centro de Estudios de Género del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (CEG-INTEC), a propósito de conmemorarse mañana el Día Internacional de la Mujer.

El informe, facilitado por INTEC y denominado “Estado de situación de las mujeres dominicanas al 2011”, indica que las mujeres dominicanas continúan teniendo altas posibilidades de morir por complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto, a pesar de que 9 de cada 10 (el 95 por ciento) de estos procesos tienen lugar en hospitales.
Según INTEC, un indicador que muestra esta realidad es la tasa de mortalidad materna, estimada en 159 defunciones por cada 100 mil nacidos vivos, muy por encima de la meta de 57 por 100 mil nacidos planteada en los Objetivos del Milenio para el año 2015 y que es superior a la de países con niveles similares de desarrollo.
“Al utilizar la tasa de 159 muertes maternas y combinarla con el estimado que tiene la Oficina Nacional de Estadísticas de 220 mil nacimientos anuales estamos hablando de aproximadamente 350 muertes maternas al año. Y si a esto se aplica el estimado de que uno de cada cinco muertes maternas tienen como causa el aborto, asimismo, aplicando el estimado de la Sociedad de Ginecología y Obstetricia, del 20 por ciento de las muertes maternas atribuibles al aborto, obtenemos la cifra de 70 muertes anuales por causa del aborto ilegal en el país”, asegura el informe.
Refiere, además, que a pesar de la gravedad del problema de la mortalidad materna y el claro vínculo que hay entre ésta y el aborto ilegal, el país continúa siendo uno de tan solo seis países del mundo donde la interrupción del embarazo no es permitida ni siquiera para salvar la vida de la mujer.
“Esta prohibición fue constitucionalizada vía el artículo 38 de la Constitución del 2010, a pesar de que ocho de cada 10 personas consultadas en el país, estaban de acuerdo con permitir el aborto cuando está en peligro la vida de la madre”.
Otra de las tendencias que indica el informe, es el aumento de la tasa de embarazo en adolescentes. Según datos de la Encuesta Demográfica y de Salud (ENDESA) del año 2007, una de cada cinco adolescentes o jóvenes (entre 15 y 19 años) era ya madre o estaba embarazada.

También indica que ésta proporción varía según el nivel de educación. “Sólo ocurre en el 4.5 por ciento de las jóvenes con educación universitaria frente al 45.6 por ciento entre las jóvenes sin escolaridad; esto representa una proporción diez veces mayor de lo ocurrido con las jóvenes universitarias”.
El informe la ENDESA, también muestra que una de cada cinco mujeres mayores de 15 años en el país ha sido víctima de violencia física en algún momento de su vida.
Señala que la probabilidad de sufrir este tipo de violencia es más alto por estar o haber estado en una relación de pareja.
“Una de cada tres mujeres separadas, divorciadas o viudas había sufrido violencia física (31 por ciento), lo mismo ocurrió con una de cada cinco mujeres casadas o unidas (21 por ciento) y sólo le había ocurrido lo mismo al 8 por ciento de las mujeres que nunca habían estado en pareja”.
Según INTEC, investigaciones nacionales e internacionales han documentado que los riesgos de sufrir violencia física y sexual son aún mayores durante la etapa de la niñez y la adolescencia.
ENDESA registra que entre las mujeres de más de 19 años que reportaron haber sido agredidas sexualmente, la mayoría fue violada por primera vez cuando tenía entre 15 y 19 años de edad. Indica que a nivel nacional, una de cada 10 mujeres ha sufrido violencia sexual.
“Nuevamente, la violencia sexual es mayor en el ámbito de las relaciones de pareja que en otras áreas. Una de cada cinco mujeres separadas (18 por ciento), divorciadas o viudas, una de cada 10 mujeres casadas o unidas (10 por ciento) y sólo el cuatro por ciento de las nunca unidas o casadas. Las mujeres que sufrieron más agresión sexual fueron las empleadas no remuneradas (13 por ciento), las empleadas remuneradas (12 por ciento) y luego las no empleadas (8 por ciento)”.
También, un estudio realizado en Centroamérica, Panamá y la República Dominicana reveló que el 72 por ciento de los hombres (y un 5.8 por ciento de mujeres) considera que no debería ser un delito pagar a una persona menor de edad para tener relaciones sexuales con ella.
El informe ofrece otros datos como que contar con menos opciones económicas y educativas parece aumentar aún más la posibilidad de sufrir violencia física y que el 60 por ciento de las personas que viven con VIH en la República Dominicana son mujeres.
También, que la violencia contra las mujeres anula o restringe su capacidad de practicar sexo seguro y evitar ser contagiadas con enfermedades de transmisión sexual como el VIH y que las mujeres, especialmente las adolescentes, son el grupo más vulnerable al VIH en la actualidad. Fuente:listindiario.com.do