Las 7 hormonas que vuelven locas a las mujeres
Las hormonas marcan el ritmo de la mujer. Su dinámica y funcionalidad en la vida, desde la pubertad, atravesando por la maternidad, hasta la menopausia. Marcan el estado de ánimo y el deseo sexual, entre otras cosas.
“Estimular todos los genes que van a activar las glándulas de la hormonalidad hará que las mujeres se vean bellas y estén en armonía. Pero para ello se requiere de disciplina y la alimentación juega un papel importante”, dijo el médico Rubén Muhlberger, especialista en anti aging y endocrinología.
El hecho de que exista un desorden puede alterar conducta y generar cambios en el cuerpo. La importancia de estar equilibrio.
Estrógenos
Es una de las principales hormonas de la mujer. Regulan la actividad del aparato genital, favorecen la flexibilidad de los capilares, la resistencia de los huesos y previenen determinados problemas respiratorios.
¿Qué pasa si están bajos los niveles? Hay nerviosismo, ansiedad, dolores musculares, calores y molestias premenstruales.
Cortisol
Regula el estrés, activando la producción de adrenalina.
¿Qué pasa si suben los niveles? Puede aparecer nerviosismo, ansiedad y taquicardias. Si son muy bajos, cansancio, desánimo y disminución de la masa muscular.
Progesterona
Interviene en el ciclo menstrual y en la actividad del aparato genital. Su falta puede generar hinchazón y retención de líquido..
Testosterona
Es responsable de aumenta el deseo sexual en la mujer. Favorece la autoestima y ayudar a que el cuerpo retenga menos grasa y la elimine mejor.
¿Qué pasa si suben los niveles? Puede generar agresividad e irritabilidad; y en caso de tenerlos bajos, pérdida de deseo sexual.
Oxitocina
Es la hormona relacionada con el amor. Está relacionada también con el deseo y grado de placer en las relaciones sexuales y el embarazo.
DHEA
Se la conoce como la hormona de la juventud. Aumenta la resistencia del cuerpo ante la fatiga y mejora la elasticidad de músculos y piel.
Tiroideas
Regulan el metabolismo y la forma en que el cuerpo quema las calorías de los alimentos. Cuando baja su cantidad (hipotiroidismo) se puede aumentar el peso, fatiga crónica y depresión.