Los ácidos omega-3 pueden ayudar a reducir el daño del tabaco sobre las arterias.
Los ácidos grasos omega 3 son ácidos grasos esenciales poliinsaturados que aumentan considerablemente el tiempo de coagulación de la sangre. Esto explicaría por qué en comunidades que consumen muchos alimentos con omega 3 (los inuit o los japoneses) la incidencia de enfermedades cardiovasculares es sumamente baja.
Ahora, un estudio realizado en Grecia asegura que los omega 3 pueden ayudar a reducir el daño del tabaco. El trabajo se ha presentado en el Congreso Mundial de Cardiología, celebrado en Dubai.
Durante cuatro semanas, el profesor Gerasimos Siasos, de la Universidad de Atenas (Grecia), observó el efecto de un tratamiento oral con 2 gramos diarios de ácidos grasos omega-3 sobre la pared arterial de los fumadores.
La conclusión fue que, al menos a corto plazo, la dieta con omega 3 mejoraba la rigidez arterial y reducía en parte los daños que el tabaco producía en la pared vascular.
Según Siasos, el efecto saludable de los omega 3 parecen estar causados por una sinergia entre diferentes mecanismos antiinflamatorios y antiateroescleróticos.
Ese mismo beneficio antiinflamatorio de los ácidos grasos omega 3 redunda en los pacientes con artritis reumatoide, como se vio en el Congreso de la Sociedad Española de Reumatología de 2011.
Los omega-3 se encuentran de forma natural en los pescados azules como el atún, trucha, sardinas, anchoas y salmón, pero también en alimentos como los huevos, galletas y algunos productos lácteos.
Otros alimentos ricos en omega-3 son lechuga, soja, espinacas, pepino, coles de Bruselas, fresas, piñas,