Murió el hombre que nos convirtió en televidentes vagos
EugenePolley, el estadounidense que inventó el control remoto para el televisor, murió esta semana a la edad de 96 años, según informaron sus ex empleadores de la empresa Zenith Electronics.
Polley marcó un antes y un después en la historia de la compañía –y en la vida de muchos de nosotros– por el diseño de su Flash-Matic, una especie de pistola que emitía un rayo de luz a células fotónicas ubicadas en cada esquina del televisor para cambiar de canal.
Cuando el ingenio salió a la luz, se lo consideró un artículo de lujo.
Pero hoy pocos podrían renunciar a él, principalmente en la era de la televisión por cable.
El Flash-Matic
Nacido en la ciudad de Chicago en 1915, Polley estudió la carrera de ingeniería en 1935. Trabajó en Zenith durante 47 años y patentó 18 inventos en Estados Unidos.
Fue en 1955 cuando el ingeniero dio con el diseño de su invento estrella, el Flash-Matic, al que luego le siguieron controles remotos sónicos e infrarrojos para televisión.
Cuando el Flash-Matic salió al mercado se vendieron unas 30.000 unidades en el primer año, incluso a pesar de tener ciertas desventajas.
Debido a que empleaba simples rayos de luz, el mero hecho de que los rayos del sol se filtraran por una ventana alcanzando al televisor podía hacer que éste cambiara de canal de forma descontrolada.
“Tan importante como el sexo”
El primer control remoto funcionaba con luz y era un tanto inestable.
Antes de que Polley diseñara su pistola de luz, una de las ideas que Zenith se traía entre manos era un control remoto conectado al televisor con un cable. Obviamente, no era lo mismo.
Fue así como dio con la fórmula del Flash-Matic, mejorada por su compañero Robert Adler inventor delSpaceCommand, que empleaba ondas de alta frecuencia de sonido para controlar el televisor.
A estos modelos les siguieron los mandos sónicos y los infrarrojos.
Polley estaba orgulloso de su invención, según dejó saber el portavoz de Zenith, John Taylor, y una vez jubilado solía enseñar a sus visitas el Flash-Matic.
Según dijo el inventor en una de las últimas entrevistas que ofreció hacia el año 2002, “el inodoro debe ser el aparato más civilizado jamás inventado, pero el control remoto es el siguiente más importante. Es incluso tan importante como el sexo”.
No obstante, como buen visionario no dejó de gozar de los nuevos avances en este tipo de tecnologías.
“Era el orgulloso dueño de una televisión de pantalla plana con un moderno mando a distancia”, añadió Taylor, “pero siempre conservó su control remoto”.
Polley recibió junto a Robert Adler, un galardón Emmy en 1997 como homenaje a ese invento que revolucionó nuestra relación con la caja tonta.