Niebla cubre todo Santiago.
SANTIAGO. Una densa neblina cubrió el centro de esta ciudad y los barrios de la parte baja, esta madrugada, la que se mantuvo por más de cinco horas y se disipó a media mañana.
El fenómeno se observó con mayor intensidad en los alrededores del Monumento a los Héroes de la Restauración, donde el tránsito de vehículos se vio afectado ya que los conductores se veían obligados a desplazarse a baja velocidad y con mucho cuidado.
La avenida Monumental, principal vía de acceso a esta ciudad y desde donde en circunstancias normales se puede ver dicho monumento, esta madrugada resultó imposible debido a la gran cantidad de neblina que la cubría, la que sobrepasó considerablemente su tamaño y entorno.
Propietarios de establecimientos comerciales ubicados en el área monumental y residentes en los sectores aledaños dijeron que hacía muchos años que no presenciaban una neblina tan densa y de tan larga duración como la de este miércoles.
La neblina también llegó a lugares periféricos, como La Zurza, repartos Taveras Oeste y Oquet, La Lotería, Los Pepines, Jardines Metropolitanos y el campus de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra.
De igual manera en barrios tan distantes como Pueblo Nuevo, Baracoa, La Joya, Bella Vista, Los Salados, El Ejido, La Otra Banda y los ensanches Bolívar, Bermúdez, Ramos, Espaillat y Libertad.
En los últimos días se han registrado aguaceros y lloviznas en esta ciudad, lo que ha incidido para que las temperaturas calurosas que han prevalecido poco a poco permitan el disfrute de otras más agradables y acorde con las festividades navideñas, cuando siempre el frío forma parte del recibimiento de cada nuevo año.
UN APUNTE
La niebla
La niebla es un fenómeno meteorológico consistente en nubes muy bajas, a nivel del suelo, formadas por partículas de agua muy pequeñas en suspensión. La mayor parte de las nieblas se producen al evaporarse la humedad del suelo, lo que provoca el ascenso de aire húmedo que al enfriarse se condensa dando lugar a la formación de estas nubes bajas. La niebla conlleva la disminución de las condiciones de visibilidad en superficie.
La dispersión de la luz en las partículas de agua que forman la niebla favorece la visibilidad en longitudes de onda.
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