Ocho síntomas de un desbalance hormonal que puedes estar ignorando
Las hormonas desempeñan un papel principal en la salud de nuestro cuerpo, ya que intervienen en las funciones de la mayoría de los órganos.
Son transmisores químicos que se encargan de estimular el funcionamiento de las células y, de hecho, regulan algunos procesos psicológicos a lo largo de la vida.
Dado que participan de forma activa en el metabolismo, el crecimiento y las funciones sexuales, su equilibrio es fundamental para el bienestar.
Por esta razón, cuando presentan algún tipo de alteración en su actividad, se desencadenan una serie de síntomas que llegan a afectar la calidad de vida.
El problema es que muchos ignoran que su aparición tiene que ver con un desbalance hormonal y tienden a confundirlo con trastornos más comunes.
Sin embargo, conociendo cómo se manifiestan y qué impacto tiene en la salud es más fácil identificarlo para brindarle un tratamiento oportuno.
En esta oportunidad queremos compartir 8 señales que, aunque comunes, es bueno tenerlas en cuenta como advertencia.
1. Acumulación de grasa abdominal
La acumulación de grasa abdominal y la pérdida de masa muscular son un síntoma común de los problemas en el sistema endócrino, casi siempre asociados con el estrés.
Los bajos niveles de estrógenos en la mujer suelen causar problemas en su vida íntima, en especial porque impiden sentir plenitud al mantener relaciones sexuales.
Este tipo de alteraciones hormonales disminuyen considerablemente la libido y, de hecho, puede influir en el estado de ánimo.
3. Dificultades cognitivas
La pérdida de la memoria, el estrés y las dificultades para pensar con claridad son síntomas cognitivos de los desequilibrios hormonales.
Por lo general incrementan los niveles de una sustancia química llamada cortisol, relacionada con los episodios de estrés y el desarrollo de algunas enfermedades.
4. Cambios de humor
El nerviosismo, la irritabilidad y otros cambios de humor bruscos suelen ser comunes por los trastornos hormonales durante el periodo menstrual y la menopausia.
Es habitual que la mujer presente sensibilidad, depresión y una serie de emociones que le impiden sentir bienestar.
Todo indica que estos síntomas se desencadenan por la fluctuación del estrógeno y la progesterona.
5. Sofocos y sudoración nocturna
Este tipo de síntomas están relacionados con los cambios hormonales que ocurren durante la menopausia. No obstante, su aparición se puede dar en edades más tempranas a causa de un desequilibrio en la actividad hormonal.
6. Sequedad vaginal
La disminución en los niveles de estrógenos puede causar alteraciones en el pH vaginal, lo cual afecta su flujo o lubricación natural.
La sequedad de la zona íntima afecta de forma directa la vida sexual, en especial porque aumenta la sensibilidad y provoca dolor durante el coito.
Suele ser común en las mujeres que llegan a la etapa de la menopausia, aunque también puede producirse de forma prematura por otros tipos de desbalances.
7. Fatiga constante
La mayoría de las personas atraviesan por algún episodio de fatiga crónica vinculado al estrés, el exceso de actividad física o alguna enfermedad común.
No obstante, cuando se produce de forma continua, es probable que esté causada por la deficiencia de hormonas tiroideas, es decir, por una condición conocida como hipotiroidismo.
Esta enfermedad afecta el ritmo del metabolismo y, dado que las hormonas disminuyen su actividad, desencadena dificultades en el sistema cardiovascular y la digestión.
8. Dolores de cabeza y migrañas
Los cambios en la actividad de las hormonas femeninas pueden provocar fuertes dolores de cabeza y episodios continuos de migrañas.
Los desequilibrios que ocurren durante ciertos momentos del ciclo menstrual, o bien al llegar a la menopausia, aumentan las cefaleas asociadas a la tensión y el exceso de inflamación.
También tiende a aparecer por desbalances en la función tiroidea, ya sea por la ya mencionada deficiencia de hormonas o por su producción excesiva (hipertiroidismo).
Fuente: mejorconsalud.com