Para ser feliz, es mejor ser generoso que tener mucho dinero
Dar dinero a quienes lo necesitan es un gesto de generosidad que no necesariamente tiene que ver con los ricos. Quienes no tienen mucho dinero, pero lo comparten, llegan a tener una sensación de felicidad y “riqueza subjetiva”. Un nuevo estudio habla de estos hallazgos.
Siempre vemos en las noticias que son los cantantes, los futbolistas millonarios y los famosos quienes donan cantidades exorbitantes de dinero para las cosas de caridad o simplemente una causa buena. Tal vez el hecho de tener dinero no es lo que los hace felices, sino el hecho de poder compartirlo.
Esto también sucede a otro nivel, a menor escala. Una persona que no es millonaria, pero que comparte y dona su dinero, se siente, de algún modo, más rica en términos monetarios y mucho más feliz. Aunque suene contradictorio, está comprobado en un estudio realizado por un profesor de la facultad de administración de empresas de Harvard (Harvard Business School) que fue presentado en el congreso anual de Psicología en Nueva Orleans, en Estados Unidos.
También tú puedes haberlo comprobado por ti mismo. ¿Te ha sucedido que luego de dar dinero a una causa buena o simplemente a alguien que lo necesita en la calle, te sientes feliz o satisfecho? De alguna manera, compartir siempre nos da una sensación de bienestar.
Según los expertos, ser generoso con el dinero incrementa un sentimiento de “riqueza subjetiva”, puesto que al dar, se crea una sensación de abundancia en quien lo hace, aunque en realidad no tenga demasiado dinero. El pensamiento de quien es generoso es “si puedo dar, entonces tal vez no estoy tan mal económicamente”.
Según los autores del estudio, donar dinero puede hacer que las personas se sientan felices puesto que esto complace un deseo inconsciente de demostrar riqueza o abundancia material para compartir.
Los autores del estudio utilizaron datos de una encuesta mundial realizada por Gallup entre más de 2,000 personas, en la cual se les preguntó cómo habían gastado alguna ganancia inesperada en el último año y qué porcentaje donaron a alguna organización caritativa. También se les preguntó cómo se sentían acerca de su situación económica.
Del total de los encuestados, 559 dijeron haber recibido alguna ganancia extra, en promedio de 1,500 dólares estadounidenses. De ese número, 99 dijeron haber donado cerca de un 3 por ciento del dinero a una organización caritativa.
Los investigadores incluyeron preguntas para identificar la “riqueza subjetiva” y encontraron que las donaciones contribuyeron de manera importante a sentirse bien. Según los cálculos de los autores del estudio, donar 500 dólares tuvo el mismo impacto en los sentimientos de bienestar que haber ganado 10,000 dólares de sueldo adicionales.
Una vez más, esto puede comprobar el porqué las personas se sienten más ricas luego de haber donado dinero y tiene que ver con la percepción de riqueza: “Si puedo regalar dinero, estoy mucho mejor de lo que pensaba”. Este reporte se considera preliminar en este momento.
De todas formas, compartir algo de lo que tenemos siempre es una buena forma de sentirnos más felices. Así que donando dinero, o tiempo, o simplemente practicando la generosidad en el día a día, estamos contribuyendo a nuestra salud mental y a la de los demás. Por algo dicen por ahí, que dar también es recibir.