Presidente acude hoy a rendición de cuentas ante Asamblea Nacional

A nivel gubernamental, el año 2017 se inició con la inauguración de obras, entre ellas escuelas y centros de cuidado de la salud. Además en sus “visitas sorpresa”, el presidente Medina prometió tierras y facilidades a agricultores de distintas regiones.

Al mismo tiempo, para el día 22 de enero se convocó una manifestación en protesta por la falta de castigo a la corrupción, en especial por el escándalo de la constructora brasileña Odebrecht, la cual admitió haber pagado US$92 millones en sobornos a funcionarios públicos dominicanos.

El propio presidente Medina se refirió al tema durante su alocución al país en la Asamblea Nacional el día 27 de febrero. Aquel día prometió poner a disposición de la justicia todos los expedientes que lleguen a sus manos y abrir las puertas del Gobierno al escrutinio público.

A partir de ese día, el mandatario vaticinó un mayor crecimiento económico para el país, aunque el resultado final fue una contracción o “ralentización”, como le han llamado algunos economistas, que ha seguido la tendencia de la “desaceleración” que desde el 2014 ha experimentado el sector productivo local y que pasó de un 7.6 por ciento en ese año a un 4.6 por ciento de crecimiento del Producto Interno Bruto en 2017.

Asimismo, el mandatario dio a conocer que se habían creado 148,532 empleos y el logro de que un millón setenta y dos mil dominicanos salieron de la pobreza que más de 816,000 familias fueron beneficiadas con una Tarjeta Solidaridad y otras 900,000 recibieron el Bono Gas Hogar, ayudas sociales del Gobierno como forma de reducir la pobreza.

De acuerdo con el planteamiento del sociólogo y politólogo César Pérez, la pobreza no puede medirse únicamente por el incremento de los ingresos a una determinada población.

“El hecho de que el régimen tenga que desplegar una amplísima campaña de dar bonos para el acceso a algunos servicios como la luz, el gas propano, el bono escolar, esa capacidad de acceso de la gente a esa forma de comer no se traduce en una capacidad de salida de la pobreza”, afirma Pérez, quien es además profesor del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC).

Pérez advierte que uno de los retos de la actual administración no es sólo la eliminación de la pobreza, sino de la desigualdad, reflejado en el estudio “Se Buscan Recursos Para Garantizar Derechos”, de la Oxfam, que revela que un niño o niña dominicana de los estratos más pobres tiene tres veces más probabilidad de morir en el primer mes de vida que uno del estrato más rico o que el 38.5 por ciento de las viviendas del 20 por ciento más pobre de la población carece de acceso al agua potable.