Robó medio millón de dólares en su empresa y repartió a los pobres
Un empleado de una empresa de seguridad en Asunción robó y desapareció con medio millón de dólares, pero 30 horas después se entregó a la Policía, manifestando que el dinero lo había repartido entre los más pobres.
Ladrón que roba a ladrón, obtiene el perdón, dice el dicho, en referencia a las declaraciones del detenido, el conductor Carlos González, quien mencionó: “Robé al ladrón”, poco después de entregarse a la Policía.
Mientras tanto, el asesor jurídico de la empresa, José Domingo Almada, declaró a Efe que se trata de una “estrategia defensiva” obvia el pretender “erigirse en un Robin Hood moderno” que “en nada lo exime” de su responsabilidad en los delitos por los que la empresa ya ha presentado una denuncia penal.
González, que trabajaba en la empresa de transporte de caudales Prosegur desde hacía apenas un año, se personó en una comisaría de Villa Elisa (afueras de Asunción) la pasada madrugada, bien vestido con la “ropita” que, según declaró, se había comprado con parte del dinero robado.
De acuerdo con su versión, se llevó “solamente” una bolsa con 600 millones de guaraníes (unos 150.000 dólares) aunque según dijo podía haber sustraído todo el dinero que había en el furgón, que dejó abandonado y con el motor en marcha cerca de una terminal de autobuses el mismo martes.
Después buscó a su hermano y a su padre, pero no encontró a ninguno de los dos y comenzó su periplo en taxi para repartir el “botín”, según su relato a varias emisoras de radio asuncenas, desde la misma instancia policial.
Del bullicioso Mercado 4 asunceno se desplazó por Ypané, Capiatá, y San Lorenzo repartiendo fardos de 5, 10 o 15 millones de guaraníes y se quedó para sí el equivalente a 200 dólares, antes de entregarse para no hacer sufrir más a su esposa, explicó.
RTU