¿Sabías que algunos animales pueden predecir los terremotos?
Los animales pueden sentir cambios químicos en las aguas subterráneas que ocurren cuando un terremoto está a punto de golpear.
Esto, dicen los científicos, podría ser la causa del comportamiento bizarro de los animales asociados con el terremoto.
Los investigadores comenzaron a investigar estos efectos químicos después de ver una colonia de sapos abandonar su estanque en L’Aquila, Italia, en 2009 – días antes de un terremoto.
Sugieren que el comportamiento animal podría ser incorporado en la predicción de terremotos.
Las conclusiones del equipo se publican en la Revista Internacional de Investigación Ambiental y Salud Pública. En este artículo describen un mecanismo por el cual las rocas estresadas en la corteza terrestre liberan partículas que reaccionan con el agua subterránea.
Los animales que viven en o cerca de las aguas subterráneas son altamente sensibles a cualquier cambio en su química, por lo que pueden sentir estos días antes de que las rocas finalmente “se deslice” y causar un terremoto.
El equipo, liderado por Friedemann Freund de Nasa y Rachel Grant de Open University del Reino Unido, espera que su hipótesis inspire a biólogos y geólogos a trabajar juntos, para descubrir exactamente cómo los animales pueden ayudarnos a reconocer algunas de las señales evasivas de un terremoto inminente.
Comportamiento errático en perros
Sin embargo, los investigadores de todo el mundo siguen persiguiendo la idea. En septiembre de 2003, un médico en Japón hizo titulares con un estudio que indicaba que el comportamiento errático en perros, como ladridos o mordidas excesivas, podría utilizarse para pronosticar terremotos.
También ha habido ejemplos en los que las autoridades han pronosticado con éxito un terremoto de gran magnitud, basado en parte en la observación de las extrañas travesuras de los animales. Por ejemplo, en 1975 los funcionarios chinos ordenaron la evacuación de Haicheng, una ciudad con un millón de personas, días antes de un terremoto de magnitud 7,3. Sólo una pequeña parte de la población resultó herida o muerta. Si la ciudad no hubiera sido evacuada, se estima que el número de muertos y heridos podría haber excedido los 150.000.