Se crea la cadena hotelera más grande del mundo
NUEVA YORK. Marriott International adquirió el viernes Starwood Hotels & Resorts Worldwide por 13,000 millones de dólares, con lo que se creó la cadena hotelera más grande del mundo: más de 5,700 propiedades y 1,1 millones de habitaciones en más de 110 países. Eso significa que el nuevo consorcio tendrá más de una de cada 15 habitaciones de hotel en todo el planeta.
Con el pacto, los hoteles de Marriott como Marriott, Courtyard y Ritz Carlton pertenecen ahora al mismo grupo que los hoteles de Starwood como Sheraton, Westin, W y St. Regis.
En total, 30 nombres de hoteles estarán bajo el manto Marriott y desde ahora forman parte de la mayor cadena hotelera del mundo.
Marriott es ahora más grande que Hilton Worldwide, que tiene 773,000 habitaciones e incluso más grande que el Intercontinental Hotels Group, que cuenta con 766.000, según STR, una firma experta en la industria hotelera.
“Tenemos la capacidad de ofrecer más opciones. Más opciones en cuanto a localidad, en cuanto al tipo de hotel deseado, en cuanto al monto de dinero que el cliente está dispuesto a ofrecer”, dijo en una entrevista con The Associated Press el jueves el presidente ejecutivo de Marriott, Arne Sorenson.
El programa de prestaciones para huéspedes frecuentes que tiene Starwood -”Starwood Preferred Guest”- fue “una razón importante, estratégica” para la transacción, dijo Sorenson. Los participantes en el programa le son profundamente leales, por lo general tienen un mayor poder adquisitivo y tienden a gastar más dinero cuando viajan.
A partir del viernes, los participantes de los programas de Starwood y Marriott podrán combinar sus membresías.
Starwood se declaró en venta en abril de 2015. La empresa -con sede en Stamford, Connecticut- ha tenido dificultades para crecer al ritmo de sus competidores, especialmente los hoteles de “servicio limitado”, es decir, propiedades más pequeñas que no poseen restaurantes ni salones para fiestas. Por lo general están ubicados al lado de carreteras, cerca de aeropuertos o en complejos de oficinas en los suburbios de las grandes ciudades.
Para poder comprar Starwood, Marriott debió ofrecer más dinero que la compañía china Anbang Insurance Group. Los reguladores antimonopolio de Estados Unidos y Europa aprobaron la venta rápidamente, pero el gobierno chino vaciló, lo que demoró la venta durante meses.
“Posiblemente fuimos un poco demasiado optimistas sobre cuán rápidamente iban a concretar esto”, dijo Sorenson.
Marriott y Starwood -al igual que otras cadenas hoteleras- poseen muy pocos hoteles individuales. En lugar de ello otorgan la marca en franquicia a cientos de propietarios distintos, que en muchos casos son compañías de bienes raíces. Son esos propietarios los que fijan los precios de las habitaciones. No es inusual que un empresario tenga un Marriott, Hilton, Hyatt y Sheraton en la misma ciudad.