Se descubren en el ombligo humano 1.400 cepas diferentes de bacterias, 662 de ellas desconocidas
Mirarse demasiado el ombligo o creerse el ombligo del mundo son dos frases hechas que, ahora, gracias a un curioso descubrimiento, tienen más sentido, y mayor legitimidad. Y es que en nuestro ombligo es toda una reserva natural de biodiversidad.
Y es que nuestra ignorancia de la diversidad microbiana es descomunal, como pone de manifiesto el estudio de la primera ronda de ADN del Proyecto de la Biodiversidad del Ombligo. Por el momento han descubierto 1.400 cepas de bacterias diferentes. Pero lo más sorprendente es que casi la mitad de ellas (662) eran desconocidas para la ciencia. Y estaban todas en nuestro propio ombligo.
El líder del equipo de investigación, Jiri Hulcr, señala que los habitantes de nuestro ombligo parecen extraños porque los biólogos no han estudiado con suficiente profundidad el tema para documentar la diversidad de la vida microbiana en variados hábitats. Él compara las reacciones a la primera ronda de resultados del ombligo con el asombro de los primeros exploradores europeos al ver la gran diversidad de África, que hoy parece banal. “Ahora estamos esperando que en cualquier momento nos aparezcan los rinocerontes o los elefantes“.
A veces, para descubrir lugares emocionantes y misteriosos no hace falta viajar al África profunda o a un planeta remoto, basta con mirarse con atención el ombligo.
fuente: www.erbol.com.co